Miguel Mirones (en el centro), acompañado por Joan Molas (derecha) y Antonio López de Ávila.
A petición de las empresas certificadas con la ‘Q’ de Calidad Turística, el ICTE ha aprobado una campaña para promocionar el sello a través de los medios de comunicación. La promoción ya está diseñada y cuenta con un lema, ‘Experiencias que dejan marQa’, pero aún falta financiarla.
Así lo anunció el presidente del Instituto para la Calidad Turística Española (ICTE) , Miguel Mirones, el pasado viernes, durante su intervención en el Congreso Internacional de Calidad Turística (CICTE), celebrado en Las Palmas de Gran Canaria.
Mirones reconoció que “los recortes presupuestarios han llegado a la Q de Calidad” y que, al mismo tiempo, las empresas certificadas están demandando al ICTE una mayor promoción del sello para que sea reconocido por los clientes. Recalcó que la “sostenibilidad futura de la marca Q está garantizada” pero también admitió que es necesario hacerla llegar al público porque “el mercado es olvidadizo”.
Con esa idea se lanzará esta acción promocional, mientras que para solucionar los problemas de financiación es partidario de optar por un “sistema de colaboración público-privada” en el que participen administraciones y empresas, aunque “es difícil implementarlo”.
Admite que todas las administraciones atraviesan una situación financiera “delicada”, pero recordó también que la marca Q es propiedad del Estado español. Y si bien reconoce que los recursos públicos son “escasos”, advirtió a las administraciones que si se quiere que la promoción sea “efectiva en el mercado” hay que afrontar un proyecto ambicioso.
La campaña ya ha sido estudiada y aprobada por la junta directiva del ICTE y ahora toca el trabajo de sumar colaboradores que participen en su financiación, explicó Mirones. Por ello van a solicitar, en primer lugar, la colaboración de las comunidades autónomas y, posteriormente, a las empresas privadas.
La idea del ICTE es lanzarla en todos los medios el próximo año, aunque desde el organismo no han podido confirmar qué presupuesto es el que necesitan para ponerla en marcha.
Mirones argumentó que, además de difundir entre los clientes el sello de calidad, con este tipo de iniciativas se pretenden incrementar el número de empresas turísticas que aspiren a obtener la Q, que actualmente se mantienen en un número “estable” (hay 1.979 empresas certificadas) “gracias a que las bajas se compensan con las altas”.
Internacionalizar la ‘Q’
En la misma mesa redonda participó el presidente de Cehat, Joan Molas, quien defendió la importancia de darle una mayor difusión a la ‘Q’, “para diferenciarla de otros sellos de calidad con un carácter más industrial, como las ISO”, y también pidió que se internacionalizara la marca para que sea reconocida también fuera de España.
Por otro lado, alabó el papel que juegan las auditorías internas que realizan las empresas certificadoras porque “ayudan a las empresas y a los trabajadores” a mejorar la gestión y la actividad.
Por su parte, el presidente de Segittur, Antonio López de Ávila, opinó que los turistas, tanto españoles como europeos, reconoce el distintivo del ICTE como un sello de calidad, pero también reclamó un mayor esfuerzo “para que la ‘Q’ se vea” con claridad en los establecimientos certificados.
