La organización de consumidores OCU ha señalado que la intención de la Consejería de Transportes de la Comunidad de Madrid de multar a Blablacar y a dos de sus usuarios es “un paso en la dirección incorrecta”, que muestra la necesidad de que las administraciones “comprendan el alcance” del consumo colaborativo como una nueva forma de consumo.
La organización ha lamentado la intención de la Comunidad madrileña de sancionar a dos usuarios de la plataforma de viajes compartidos y a la compañía con multas de 4.000 y 8.000 euros al entender que se estaba produciendo una infracción de la Ley de Ordenación del Transporte Terrestre.
Según un estudio llevado a cabo por OCU el pasado mes de noviembre, las tarifas propuestas por los usuarios de Blablacar reducen el gasto de forma importante, pero no permiten hacer un negocio con los trayectos pues para cubrir la gasolina, los hipotéticos peajes o el desgaste de los neumáticos, entre otros gastos.
De esta forma, la organización reitera “su apoyo al fenómeno del consumo colaborativo entre particulares, donde todos los actores implicados, plataformas y consumidores, cumplan con sus obligaciones, y reclama que las autoridades cumplan con su obligación de dar certidumbre a los participantes en un modelo que es beneficioso para el conjunto de la sociedad tanto desde el punto de vista económico, como desde el social y el medioambiental”.
OCU lamenta las sanciones contra los usuarios de Blablacar
1 COMENTARIOS
Angel Luis Martín
19/10/2016 | 11:27 horas
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No es de extrañar que la opinión de la OCU sea esta. Ellos mismos practican algo parecido, la percepción de la gente es que son una especie de servicio social económico...claro con las exenciones de impuestos y demás todas las cuentas cuadran.