Las compañías de bajo coste ya alcanzan el 10% del mercado español en vuelos de larga distancia, lo que está forzando a las aerolíneas regulares a bajar sus precios, según datos de liligo.com.
Como consecuencia, los precios han bajado y es posible volar por menos de 200 euros a destinos de larga distancia. Al mismo tiempo, las aerolíneas regulares han comenzado a modificar sus tarifas hasta hacerlas tan competitivas como las de las aerolíneas low cost.
La irrupción de las low cost ha revolucionado el sector aéreo extendiendo nuevas fórmulas de productos y modelos operativos entre las aerolíneas de red para hacer sus precios más competitivos.
Desde 2014 las aerolíneas de bajo coste han incrementado su cuota de mercado en los vuelos de larga distancia. En Francia han aumentado un 3% solo el año pasado con los vuelos transoceánicos de Norwegian en este país.
“Las aerolíneas de bajo coste seguirán ganando mercado en los vuelos de larga distancia, pero este crecimiento será lento ya que las compañías regulares están ofreciendo tarifas muy competitivas”, señala el director de liligo.com, Mario Gavira. La asignación de asiento, comida a bordo o facturación de maleta, son las opciones de servicios que las tradicionales ofrecen ahora como opción.
Aumento en España
En las rutas de larga distancia desde Madrid o Barcelona, el crecimiento fue del 7% entre 2010 y 2016. Un aumento que se debe especialmente al inicio de operaciones de Norwegian y Wow Air.
Los viajeros españoles están más dispuestos a volar en aerolíneas de bajo coste para vuelos de larga distancia que los viajeros franceses, según los datos del buscador de viajes.
Cada vez son más las aerolíneas de bajo coste que empiezan a ofrecer viajes de larga distancia desde España. Eurowings se establecerá en Palma de Mallorca. IAG aterriza en este segmento, como Norwegian, desde Barcelona y bajo una nueva marca, Level.