La crucerista Hurtigruten prohibirá todos los plásticos de un solo uso como pajitas, vasos, tapas, bolsas, envases de mantequilla y delantales a partir del 2 de julio con la intención de eliminar cerca de 17.000 kilos de este material al año.
Esta medida será implantada en todos los barcos de la compañía y en todas sus rutas, ya sea en la legendaria Ruta Costera Noruega como en los cruceros de expedición polo a polo y, además, se impondrá a todos los proveedores de la compañía –hoteles, restaurantes y otros establecimientos relacionados con las operaciones terrestres operadas por su filial Hurtigruten Svalbard–.
El CEO de Hurtigruten, Daniel Skjeldam, ha comentado: “En Hurtigruten, nos hemos centrado en el problema de la contaminación por plástico durante años. Se habla mucho del impacto del plástico en nuestros océanos, pero ya es hora de actuar”.
“Nos desharemos del plástico de un solo uso a bordo de todos los barcos de nuestra compañía para este verano y esperamos que el resto de compañías de cruceros sigan este ejemplo”, ha añadido por Skjeldam.
Nueve barcos con GNL
Hurtigruten, que celebra este año su 125 aniversario, ha anunciado además que nueve de sus barcos que se encuentran en proceso de construcción y que estarán listos para el año 2019 se adaptarán a la propulsión de GNL y baterías para contribuir a la eficiencia y sostenibilidad del medio ambiente.
De igual forma, Hurtigruten aboga por la prohibición de los combustibles pesados y por la implantación de regulaciones más estrictas, además de ser una compañía que se dedica a la investigación, lucha contra la contaminación y financiación de proyectos locales y globales a través de la Fundación Hurtigruten.
Daniel Skjeldam ha manifestado al respecto: “La contaminación por plástico es la mayor amenaza para nuestros océanos. Hurtigruten opera en las aguas más remotas del mundo, lo que significa que tenemos la responsabilidad de proteger estas áreas para la población local y las futuras generaciones de exploradores”.
“Nadie puede ganar la guerra al plástico en solitario y sin aliados, por lo que nuestra meta es exigir mucho a nuestros proveedores para que nos apoyen en estas medidas. Navegar en las aguas más prístinas del planeta conlleva una responsabilidad, y por lo tanto, la implantación de medidas sostenibles”, ha añadido Skjeldam.