El aumento del precio del carburante ha tenido un impacto negativo en Air France-KLM.
Los ingresos del grupo Air France-KLM sumaron 12.432 millones de euros en el primer semestre del año, lo que supone un 0,8% más con respecto al primer semestre del pasado ejercicio y un incremento del 4,9% en base comparable.
El grupo franco holandes registró unos ‘números rojos’ de 159 millones de euros de enero a junio, resultado que supone una caída de 609 millones de euros con respecto al mismo periodo de 2017, un resultado que ha achacado al impacto de las huelgas de sus trabajadores, que asciende a 335 millones de euros.
El resultado bruto de explotación (Ebitda) alcanzó los 1.670 millones de euros, lo que supone un 41,2% más que en el mismo periodo de 2017, mientras que el resultado neto de explotación asciende a 228 millones de euros, lo que supone un descenso de 325 millones de euros frente a un año antes.
Entre abril y junio la compañía perdió 260 millones de euros por las huelgas de su personal y el conflicto por la disputa salarial que provocó la dimisión de su presidente, Jean-Marc Janaillac, tras el rechazo de la mayoría de la plantilla a la propuesta de la dirección de Air France en una consulta realizada a sus trabajadores.
En el segundo trimestre, Air France-KLM logró un beneficio de 109 millones de euros gracias a sus buenas cifras de tráfico, una cantidad que, sin embargo, supuso 484 millones de euros menos. Su facturación creció un 4% hasta los 6.625 millones de euros.
El beneficio operativo fue de 61 millones de euros, una mejora de 17 millones en comparación con el segundo trimestre de 2017, gracias a la evolución de Transavia. En el segundo trimestre redujo su capacidad un 2,5% en comparación con el año pasado, debido al reemplazo de tres aviones 747 de KLM y a la cancelación de vuelos de Air France por la huelga de su personal, que sumó una docena de días de paro.
De abril a junio, el Ebitda fue de 1.048 millones de euros, un descenso de 244 millones de euros, y su resultado neto de explotación alcanzó los 345 millones, 241 millones de euros menos, con un impacto negativo por las huelgas de 260 millones de euros entre abril y junio.
Casi un 8% menos de capacidad en Francia
En cuanto a la actividad punto a punto en Francia, la capacidad se redujo significativamente en un 7,8% en comparación con 2017, en respuesta a la fuerte competencia del TGV.
El grupo franco-holandés, que preside la exministra francesa de Empleo Anne-Marie Couderc como medida transitoria, pues aún no ha nombrado sustituto tras la salida de Janaillac, señala también al aumento del precio del carburante como otro factor que impactó negativamente en sus resultados financieros. La factura del combustible, incluidas las coberturas, ascendió a 1.184 millones de euros.
No obstante, la fuerte demanda ayudó a aumentar los ingresos unitarios a tipos de cambio constantes, compensando parcialmente el aumento de los precios del combustible de forma que el ingreso unitario general por asiento kilómetro disponible aumentó en un 1,6%.
Los costes unitarios aumentaron un 2,4% por el cambio de divisas, repunte de los precios del combustible y gastos de pensiones. Los costos salariales netos han aumentado un 2% en el segundo trimestre de 2018.
A 31 de junio, la deuda neta del grupo se sitúa en 6.256 millones de euros, lo que supone 315 millones de euros menos con respecto a diciembre de 2017. El ratio de deuda neta/Ebitda se sitúa en 1,4 veces.
El flujo de efectivo libre ajustado de las operaciones para el grupo ascendió a 141 millones en el primer semestre, lo que supone 517 millones de euros en comparación con 2017, por el impacto de las huelgas y el aumento neto de las inversiones hasta 222 millones de euros.
Perspectivas
A pesar de que el coste de 335 millones de euros derivado de las huelgas en la primera mitad del ejercicio pesará sobre el resultado anual, la compañía aérea planea seguir reduciendo su deuda neta.
Asimismo, estima que los ingresos unitarios para el tercer trimestre de 2018 y el conjunto del año se sitúen por encima del nivel registrado en 2017 a un tipo de cambio constante, con un crecimiento de su oferta de entre un 2,5% y un 3,5% para el conjunto del año.
El objetivo es que sus costes unitarios se mantengan planos o crezcan un 1% en el año, tras crecer un 2,4% segundo trimestre (crecimiento que se explica en un 3,1% por las huelgas en Air France).
