La defensa del antiguo propietario de Viajes Marsans, Gerardo Díaz Ferrán, ha afirmado que una de las razones de la quiebra de la compañía turística en junio de 2010 fue la retirada de apoyo por parte del Gobierno socialista al entonces presidente de la CEOE por su negativa a pactar a la reforma laboral, que se aprobó ese mismo mes.
“Se había opuesto a la reforma laboral y había perdido el apoyo del Gobierno” afirmó el abogado de Díaz Ferrán, Álvaro Remón, citando informaciones periodísticas, durante la exposición de conclusiones de oposición a la calificación de culpabilidad del concurso en la vista celebrada por el Juzgado de lo Mercantil número 12 de Madrid.
El letrado del expresidente de la CEOE afirmó que esta negativa provocó que el Gobierno presidido por José Luis Rodríguez Zapatero no ayudara a Viajes Marsans frente al Gobierno argentino cuando expropió Aerolíneas Argentinas por un euro, hecho que se consumó el 17 de diciembre de 2008. “Fue lo mismo que le acaba de pasar a Repsol”, señaló el abogado, quien añadió que “entonces no hubo ayuda como ahora”.
Por su parte, el socio de Díaz Ferrán durante 40 años en Viajes Marsans, Gonzalo Pascual, aseguró tras la celebración de la vista que Zapatero encargó al entonces secretario general de la Presidencia del Gobierno, Bernardino León, “arreglar el tema de Aerolíneas”, aunque evitó comentar nada más al respecto.
Durante la vista, el abogado de Pascual, Raul Jiménez, secundó este argumento asegurando que Díaz Ferrán “dejó de tener apoyo del Gobierno porque no quiso plegarse a los intereses políticos”.
Sin respaldo frente a la Iata y los bancos
El abogado afirmó que este hecho provocó que el Ejecutivo dejara de ayudar a Viajes Marsans en sus negociaciones con la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) para evitar la retirada de la licencia para vender billetes, que se produjo en abril de 2010. Así como en las conversaciones con las entidades financieras para negociar los préstamos, cuando “sí lo había hecho anteriormente porque no se podía dejar caer a la primera empresa turística” del país, explicó Jiménez.
Al respecto, la defensa de Díaz Ferrán achacó las dificultades para acceder al crédito sufrida por Viajes Marsans en los primeros meses de 2010 a la crisis financiera iniciada en agosto de 2008. “Los bancos acaban de ser financiados con 100.000 millones de euros, no se lo daban (crédito) porque la banca no tenía dinero, como ha quedado comprobado”, señaló.
El 20 de octubre de 2010, Díaz Ferrán anunció que no se iba a presentar a la reelección de la presidencia de la patronal por “motivos personales” y para hacerse cargo de sus empresas. Viajes Marsans ya había sido declarada en concurso de acreedores cuatro meses antes con una deuda de casi 200 millones de euros.
Comprometieron su patrimonio personal
Por otro lado, los abogados de Díaz Ferrán y Pascual insistieron en negar que los propietarios de Viajes Marsans fueran responsables de la quiebra de la compañía, ya que ambos avalaron las operaciones con su patrimonio personal. Además, alegaron que la compañía turística tenía una oferta de compra por parte de Orizona por 300 millones de euros.
La defensa de Díaz Ferrán recordó que su cliente “cogió la empresa en 1983 y dio de comer a 24.000 trabajadores durante 40 años”, a los que no dejó de pagar “nunca” hasta la presentación del concurso de acreedores en junio de 2010.
Similitudes con Bankia
Además, ambos aseguraron que la causa de la insolvencia de la compañía fue la retirada de la licencia para vender billetes emitida por la IATA en abril de 2010, lo que hizo caer las ventas un 86%. “Fue una decisión que tuvo repercusión pública, los clientes se pudieron nerviosos y se produjo una situación similar a la de Bankia”, afirmó Jiménez.
Por último, los abogados explicaron que los casi 300 millones de euros que salieron de Viajes Marsans con destino a la matriz, Teinver, en forma de préstamo, estaban destinados a realizar inversiones en Aerolíneas Argentinas y que la expropiación por parte del Gobierno argentino hizo que se perdieran.
Las defensas consideraron que estos traspasos de dinero eran operaciones normales entre empresas y que la negativa de la auditora PwC a firmar las cuentas de Viajes Marsans correspondientes al ejercicio 2008 a 2009 no se debía a estas supuestas irregularidades.
El juicio por la culpabilidad de la quiebra de Viajes Marsans quedó visto para sentencia. La Administración concursal y el Ministerio Fiscal piden 15 años de inhabilitación para Pascual y Ferrán, así como dos años para la última propietaria de la empresa turística, la sociedad Posibilitum Business, del empresario experto en insolvencias Ángel de Cabo.
El abogado de Díaz Ferrán culpa a Zapatero de la quiebra de Marsans
1 COMENTARIOS
Agente - Madrid
14/06/2012 | 23:17 horas
#1
Y de la muerte de Manolete tambien tiene la culpa Zapatero, hay que ser cara dura y sinverguenza como este tio para echarle tanto morro a la vida.