De izquierda a derecha: Franch, Murillo y García.
La cobertura de seguro en caso de siniestro con viaje pagado con tarjeta de crédito “no siempre es suficiente” cuando se viaja a determinados destinos, según ha asegurado Julia Franch, Managing Director de Bestours y vicepresidenta de Transportes Aéreos en las IV Jornadas Técnicas de CEAV.
En la mesa ‘Cobertura de seguro en caso de siniestro con viaje pagado con tarjeta de crédito’ se hizo un llamamiento a interesarse por saber qué coberturas incluyen estas pólizas, qué se entiende por medio de transporte público y cuál es el importe que cubre el seguro.
En opinión de Josep García, Manager de Aon Risk Solutions/AON Taeds “este tipo de cobertura como valor añadido está muy bien pero si el cliente quiere estar cubierto tiene que contratar un seguro en el mostrador de la agencia”.
Los agentes de viajes están obligados por ley a ofrecer un seguro de viajes a sus clientes que en muchos casos deniegan alegando que cuentan con el de la tarjeta de crédito, pero a la hora de contratarlo es importante valorar la parte de accidentes y la parte de asistencia.
“Las agencias no deben informar de lo que cubren las pólizas de las tarjetas porque adquieren responsabilidad aunque puede aconsejar al cliente que se informe bien por si fuera insuficiente para el viaje”, explica García.
Franch señala que un alto porcentaje de los clientes desconoce las coberturas de los seguros de viajes de las tarjetas de crédito y hay países en donde la “asistencia médica es muy costosa como EE UU y China”. Desde CEAV se insta a que se verifique bien el condicionante de la póliza.
El cliente corporativo usa el seguro de viajes principalmente para pérdidas de vuelos y maletas, además de la asistencia médica, mientras que el vacacional le interesa más por los gastos sanitarios.
“Son más importantes las exclusiones”
“En todas las tarjetas de crédito personales el seguro de asistencia se tiene por el hecho de ser el titular”, informa Rafael Murillo, jefe de la Unidad de Negocio de Empresas de Iberia Cards. En caso de accidente, si no se llega a la cuantía necesaria, las aseguradoras recopilan todas las coberturas que tiene el cliente –ya sea con la tarjeta de crédito, con la mutua médica, seguro de hogar, de trabajo, entre otros–, para poder afrontar la factura.
Murillo señala que “son más importantes las exclusiones que las coberturas”. Recalca que en los seguros de viajes de las tarjetas se considera transporte público a “todo aquel que no es privado, está sujeto a una regulación, a precios y a horarios”. Por el contrario, el transporte que depende de una persona física es privado.
“En tema de transporte público, nos acogemos a lo que esté regulado en los países en donde se encuentre el turista, cuando no está regulado deja de considerarse público”, informa.
Murillo añade que en el caso del rent a car, la póliza de Iberia Cards dice que el coche de alquiler está cubierto como medio público y tiene la misma cuantía. Además, es itínere por lo que “cubre al cliente desde que sale hasta que vuelve, incluyendo el taxi y coche personal”.
Fichero con asegurados
Asimismo, García recuerda que “existe un fichero en el que las compañías aseguradoras tienen que incluir los datos de asegurados con seguros de vida” y agrega que es usual que “los beneficiarios no sepan que estaban asegurados”.
En caso de siniestro, “la obligación es informar y este registro va más allá”, asegura el representante de AON Taeds. No obstante, aconseja revisar el fichero para comprobar los seguros de nuestros familiares, que también incluye los que se disponen a través de los bancos.
García advierte de que en un viaje ‘corporate’ el soporte del asegurado es su empresa pero en el caso del cliente vacacional responde su familia.
