La moratoria hotelera de un año en Barcelona no ha desanimado la inversión en la ciudad en 2015, que creció un 25% respecto a 2014 hasta 347,5 millones de euros, aunque sin alcanzar los más de 500 millones de 2013, ha indicado este miércoles en rueda de prensa el director de Inversiones de la consultora inmobiliaria Aguirre Newman en la capital catalana, Hipólito Sánchez.

Con esta decisión del Consistorio encabezado por Ada Colau –para definir el modelo turístico de la ciudad– se ha frenado la inversión en nuevos proyectos, pero no las transacciones de establecimientos ya existentes, que de hecho han subido de precio por la menor oferta de producto, ha indicado la directora general de Aguirre Newman en Barcelona, Anna Gener.

“Todo el mundo quiere hoteles en Barcelona porque funcionan bien”, ha sostenido, con unas perspectivas para 2016 de mantenimiento de la tendencia de inversión al alza porque los datos del sector hotelero siguen mejorando respecto a llegada de turistas y gasto que realizan, y desaparecerá el freno de los proyectos de transformación de edificios para destinarlos a hotel con el fin de la moratoria hotelera a mediados de este año.