Marc Allen hasta ahora presidente de Boeing Internacional, ha sido nombrado presidente de operaciones y responsable de la integración de ambos negocios.
La compañía aeronáutica Boeing ha nombrado a los directivos que liderarán su ‘joint venture’ con Embraer, fruto de la adquisición del 80% de la división comercial de aviones de la firma brasileña por parte del constructor aeronáutico estadounidense, que ambos fabricantes esperan eche a andar a finales de este año. Los nombramientos entrarán en vigor el próximo 22 de abril, ha anunciado en un comunicado el constructor aeronáutico.
En concreto, Marc Allen, hasta ahora presidente de Boeing Internacional, ha sido nombrado presidente de operaciones y responsable de la integración de ambos negocios, y John Slattery, consejero delegado de Embraer Commercial Aviation, será el presidente y consejero delegado de la nueva empresa conjunta. Slattery, de 50 años, reportará a Allen y tendrá su sede en Sao Jose dos Campos, Brasil.
Al frente de la división internacional de Boeing se ha designado a Michael Arthur, de 68 años y actual responsable de la compañía en Reino Unido e Irlanda, quien sustituirá a Allen en dicho cargo.
Allen, de 45 años, encabezará así la integración de las operaciones de Embraer con Boeing, para el desempeño financiero y el crecimiento de los activos de la sociedad conjunta. Asimismo, se mantendrá como miembro del consejo de administración de Boeing. El cambio entra en vigencia el 22 de abril.
La crisis del 737 max no afecta a la alianza
Embraer dijo la semana pasada que la crisis del Boeing 737 MAX no afecta el desarrollo de la joint venture, en la que el constructor estadounidense tendrá una participación del 80%, valorada en 4.200 millones de dólares (3.700 millones de euros), y la firma aeronáutica brasileña el 20% restante.
Ambos fabricantes, que anunciaron su acuerdo en diciembre de 2018 y aprobaron los términos en enero, cifran en 5.260 millones de dólares (4.634 millones de euros) la actividad de la nueva empresa que permitirá a las dos compañías acelerar su crecimiento en el segmento de los aviones pequeños.
Este mercado se espera represente más de 6.000 nuevos aviones en los próximos 20 años y la alianza de estos dos fabricantes permitirá competir con la desarrollada por Airbus y Bombardier, después de que el rival europeo de Boeing haya comprado el 50% de la sociedad C Series Aircraft Limited Partnership (CSALP), encargada de la producción del programa C-Series de pasillo único (aviones CS100 y Cs300) del constructor canadiense.
El acuerdo también incluye una alianza para comercializar el avión de carga militar KC-390. En este caso, Embraer tendrá una participación del 51% en la empresa conjunta y Boeing el 49% restante.
El acuerdo firmado entre ambos fabricantes aeronáuticos estaba sujeto a la aprobación del Gobierno de Brasil y cuenta ya con el visto del ejecutivo de Bolsonaro, que posee una acción de oro (golden share) con derecho a veto desde que Embraer se privatizó en 1994, pero está pendiente de otras regulaciones.
