El sector de la hostelería ha registrado un descenso medio de 72.000 trabajadores en marzo con respecto a 2019.
La organización empresarial Hostelería de España, que representa a los más de 300.000 restaurantes, bares, cafeterías y pubs nacionales, ha reclamado al Gobierno la suspensión total de la cotización de autónomos por la crisis sanitaria del coronavirus, que está afectando “gravemente” al sector por el cierre de los locales para frenar la expansión de la COVID-19.
En concreto, la pandemia ha golpeado “duramente” a la hostelería, con un descenso medio de 72.000 trabajadores en marzo con respecto a 2019, lo que supone una caída de un 4,6%, según los datos de empleo de marzo.
El impacto del cierre de establecimientos a mediados de marzo como consecuencia de la crisis sanitaria se ha visto especialmente reflejado en el análisis de datos ofrecidos desde el 12 de marzo, con una caída del 14,3%, lo que supone 181.149 trabajadores menos en el conjunto de la hostelería.
Baleares la más afectada
Por comunidades autónomas, en todas ellas hubo una evolución negativa del empleo hostelero respecto al año anterior, con el mayor descenso porcentual en Baleares (-9,2%), aunque también cayó por encima de la media nacional en Andalucía (-5,9%), Aragón (-5,4%), Extremadura (-5%), y la Comunidad Valenciana (-4,7%).
La patronal ha advertido de que estos datos son “solo un pequeño reflejo de la caída de empleo” que se registrará a partir de abril y ha señalado que la dificultad de tramitación de los ERTE por sus “procesos administrativos y numerosas contradicciones entre administraciones” ha provocado que muchos de los más de 300.000 establecimientos hosteleros no hayan podido activar todavía estos procesos a pesar del cierre forzoso de sus negocios derivado del estado de alarma.
Dificultad para mantener el empleo
Hostelería de España ha indicado que la “letra pequeña” de los ERTEs es “muy difícil” de aplicar y que las cifras de empleo anteriores a la crisis no se van a poder mantener en los seis meses siguientes a la reapertura de los establecimientos, tal y como el Gobierno exige a las empresas que se acojan a estos procesos en un sector que “presenta graves dificultades para mantener el empleo, cuya actividad es muy estacional y cuyos negocios se van a ver duramente afectado por el parón y por la bajada del turismo”.
De esta forma, Hostelería de España reclama medidas para garantizar la subsistencia de los negocios hosteleros como la suspensión total de la cotización de autónomos de hostelería, incluyendo la de marzo y resolver la suspensión de pago de los arrendamientos de los locales hosteleros durante el tiempo que éstos se encuentran inactivos.
La patronal también solicita buscar la flexibilización de la financiación bancaria y la renegociación de pólizas con la finalidad de que las empresas obtengan liquidez para hacer frente a todas sus obligaciones, así como moratorias de las hipotecas y créditos con los bancos de préstamos.
