La inversión en hoteles de lujo se consolida en Barcelona. El sector hotelero ha cerrado el primer semestre con una inversión de 285 millones de euros en Barcelona según datos de CBRE. El 36% de este volumen se ha concentrado en hoteles de cinco estrellas y cinco estrellas gran lujo, con cerca de 100 millones de euros y por encima de la media nacional (30%).
En este sentido, destaca la compra por parte de Atom de los hoteles Gran Lujo Miramar, con 75 habitaciones, y el Gran Hotel La Florida, con 70 habitaciones, y la venta de Ocean Drive Barcelona, con 98 habitaciones. Estas transacciones han alcanzado prácticamente los 100 millones de euros, un 36% del total de la inversión registrada en el sector hotelero de Barcelona en el primer semestre del año.
Con 285 millones de euros, el mercado catalán se ha situado como la segunda ubicación de España preferida por los inversores, con un peso del 21% sobre el total, por detrás de Baleares (29%). Sin embargo, la inversión en Barcelona ha caído un 34% respecto al primer semestre del año pasado debido al excepcional comportamiento de este sector en 2023, con el cierre de las ventas del Mandarin Oriental Barcelona, Sofía Barcelona y Dolce Sitges.
En total, en los seis primeros meses del año se han cerrado doce operaciones en Barcelona, con 1.163 habitaciones. Esta cifra se sitúa por encima de las seis transacciones registradas en el mismo periodo de 2023, con 1.005 habitaciones. “Estos datos reflejan el buen impulso en la inversión del sector hotelero gracias al cierre de operaciones de volumen medio. A diferencia del año anterior, este ejercicio no estamos viendo tantas rotaciones de cartera”, ha explicado Jorge Ruiz, director de Hoteles en Iberia de CBRE.
En cuanto al perfil del inversor, el inversor español está cada vez más presente en el mercado de Barcelona, con un peso del 38% sobre el total en el primer semestre, seguido del inversor de Reino Unido, con un 21%.
Por su parte, las rentabilidades prime hoteleras se han mantenido estables en un 5,25% en Barcelona en el segundo trimestre. La tendencia para los próximos meses es positiva en base a la nueva situación de tipos de interés, y la evolución de las rentabilidades prime el resto del año estará muy ligada a la bonanza en la operativa y la inversión.