Los parques temáticos Disneyland París y Walt Disney Studios obtuvieron unos ingresos de 306,3 millones de euros en el primer trimestre de su ejercicio –de septiembre a diciembre–, lo que supone un 6,3% más que en el mismo periodo del año anterior, informó la compañía Euro Disney.
La compañía atribuyó esta disminución al descenso de visitantes procedentes de España, Francia y Holanda, a pesar del crecimiento del gasto medio por cliente, que aumentó un 4% en el caso de los parques temáticos y un 6% en los hoteles de la compañía.
Por contra, la facturación de los parques temáticos de la compañía disminuyó un 3% hasta alcanzar los 172,9 millones en el primer trimestre. En esta línea, la facturación de los hoteles se redujo un 7,4%, hasta los 122,4 millones de euros, frente a los 129,8 millones alcanzados en el mismo periodo del año anterior.
El descenso de ingresos en hotelería se debió principalmente a una bajada de la ocupación hotelera con hasta 51.000 estancias menos que en el mismo periodo del ejercicio anterior.
Ante el menor número de visitantes, el aumento del gasto medio fue posible gracias a unas altas tarifas diarias, que compensaron el menor gasto destinado a comidas y bebidas.
Los ingresos del sector inmobiliario decrecieron un 4,9%, al pasar de 6,3 millones a 1,4 millones de euros en 2014, debido a una venta de tierras realizada por la compañía durante este periodo.
En el ejercicio de 2013, 600.000 franceses menos visitaron los parques de Disneyland Paris, disminuyendo también las cifras de visitas de personas procedentes de España, Italia y Holanda.
La compañía recordó que el entorno económico sigue siendo un “reto”, por lo que el grupo continúa siendo cauto y confía en su estrategia a largo plazo, que incluye la renovación del hotel Disney’s Newport Bay Club y la inauguración de la atracción basada en ‘Ratatouille’ como novedad para 2014.
Según el presidente de Euro Disney, Philipe Gas, la estrategia dirigida a aumentar la satisfacción de los clientes explica el aumento del gasto, que ayudó a compensar la caída en la asistencia y la ocupación hotelera respecto al año pasado.