Los trenes AVE y Larga Distancia de Renfe transportaron 31,34 millones de pasajeros durante el pasado año, más del doble respecto a los 14,81 millones que viajaron en avión para sus desplazamientos dentro de la Península, mercado en el que compiten los dos modos de transporte.
El ferrocarril gana la partida al avión dentro del territorio peninsular a pesar de que el transporte aéreo registró un mayor crecimiento que el tren, según datos oficiales de cierre de año de Renfe y Aena en los que se excluyen los viajes aéreos entre la Península y las islas.
En concreto, el avión ganó casi un millón de viajeros para trayectos entre ciudades de la Península el pasado año, lo que implica un incremento del 7,24%, mientras que, de su lado, los trenes AVE y Larga Distancia atrajeron a 1,12 millones de nuevos pasajeros y aumentaron así el total de viajeros transportados en un 3,7%.
En virtud de estos datos, los trenes AVE y Larga Distancia copan hasta el 87% de los viajeros frente al avión en alguno de los principales corredores entre grandes ciudades, como es el caso de la conexión entre Madrid y Valencia.
En esta relación, durante 2017, un total de 2,41 millones de viajeros eligieron el tren para trasladarse entre estas dos ciudades, frente a los 342.000 (el 12,5%) que se decantaron por el avión.
La batalla del ‘puente aéreo’
En cuanto al trayecto de mayor movilidad del país, el que une Madrid y Barcelona, el ferrocarril dobla al avión, dado que el AVE transportó 4,11 millones de viajeros en conexión directa entre las dos capitales, el 61,1% del total, frente a los 2,33 millones (el 38,9%) que prefirieron el ‘puente aéreo’.
Pese a esta diferencia, se trata de la relación de todas las que unen grandes capitales en la que el avión sigue presentando una mayor cuota de mercado. Se da la circunstancia de que es la elegida por Renfe para estrenar a comienzos de 2019 su nuevo servicio de AVE ‘low cost’ EVA, con una oferta inicial de cinco frecuencia por sentido y precios hasta un 25% más bajos que los del AVE convencional.
De su lado, el AVE más longevo, el que une Madrid-Sevilla, es otro de los que más terreno han ganado al avión. El pasado año, el tren trasladó entre las dos ciudades 2,58 millones de pasajeros el 85,9% del total, frente a los casi 300.000 que viajaron en avión.
En el lado opuesto, el AVE a Alicante, uno de los más ‘jóvenes’, ya ha ganado también la ‘batalla’ al avión. Al cierre del pasado año, este nuevo tren transportó al 79,8% (1,28 millones) de los pasajeros que se movieron entre ambas ciudades.
El ferrocarril también despunta frente al avión incluso en los viajes a ciudades a los que aún no llega directamente la Alta Velocidad, sino que los trenes realizan por este tipo de vías parte de su recorrido para acortar tiempos de viaje. Este es el caso de los enlaces desde Madrid hasta Asturias o Pamplona, donde el tren copa el 56% y 78% de los viajeros frente al avión, respectivamente.