Desde la pandemia, Spirit ha vivido una situación complicada, acrecentada por la dura competencia que se ha dado en el país.
La aerolínea estadounidense Spirit Airlines se ha declarado en quiebra ante la gran presión de la competencia y tras fallar su proceso de fusión con JetBlue.
Según publica Bloomberg, la aerolínea se ha acogido al Capítulo 11 de la Ley de Quiebras de Estados Unidos después de negociar con sus acreedores y tenedores de bonos, con los que habría alcanzado un acuerdo para reestructurar la deuda.
La compañía tenía plan de ser adquirida por JetBlue por 3.800 millones de dólares (3.600 millones de euros), pero la operación fue bloqueada por la justicia, preocupada por los posibles efectos sobre la competencia del transporte aéreo en Estados Unidos.
Desde la pandemia, Spirit ha vivido una situación complicada, acrecentada por la dura competencia que se ha dado en el país, con compañías más grandes ofreciendo billetes a precios bajos.
Desde 2020, las cuentas de resultados de Spirit han cerrado en negativo y sus acciones se han devaluado un 93% a lo largo de este año.
