DRV no ha tenido que lamentar una oleada de cierres de agencias de viajes.
La crisis sanitaria ha golpeado duramente a las agencias alemanas lo que les ha llevado a cerrar el año turístico (noviembre 2020-octubre 2021) con una caída del 70% con respecto a 2019, lo que supone una disminución de la facturación de 12.000 millones de euros, según afirmó Norbert Fiebig, presidente de DRV en su convención anual que se celebra durante estos días en Grecia.
“Hemos cerrado un año difícil con un invierno con todo bloqueado donde tuvimos que esperar al verano para ver un repunte de las ventas que han estado caracterizadas por la ‘ultima hora’”, explicó Fiebig.
Los datos recabados por Travel Data + Analytics (TDA) para DRV indican que en la temporada de invierno (noviembre 2020-abril 2021) las ventas cayeron un 94% con respecto a las cifras obtenidas en el año previo a la pandemia.
Sin embargo, en el la temporada estival (mayo-octubre 2021) la demanda de viajes aumentó de forma considerable ya que los ciudadanos empezaron a acercarse a las agencias. “Durante algunas semanas, el volumen de reservas estuvo muy por encima de 2019, lo que indica la gran necesidad que hay de viajar después de los meses de bloqueo”, aseguró Fiebig.
A pesar de ello, el negocio “excepcionalmente bueno” del verano no ha podido compensar las pérdidas que hubo durante el cierre ya que la temporada de verano de 2021 muestró una disminución acumulada en las ventas del 56% en comparación con 2019.
Los viajes de larga distancia y los cruceros fueron los productos que más acusaron los efectos de la pandemia, ya que registraron descensos del 73% y 67% respectivamente.
Ante estas cifras Norbert Fiebig señaló que “todavía no hay una recuperación total del sector turístico, por la incertidumbre y el temor a que se impongan nuevas restricciones a los viajes, por ello, el 60% de las agencias encuestadas no esperan una recuperación total hasta 2023”.
De cara a la próxima temporada de invierno, Fiebig se mostró cautelosamente optimista porque actualmente se encuentran en un “punto de inflexión”.
“La apertura de Estados Unidos y Tailandia ha sido una buena noticia, con lo que espero que las reservas de viajes van aumentar en las próximas semanas”, apuntó.
Reservas de última hora
Las restricciones impuestas por el Gobierno alemán para frenar la COVID-19 y la incertidumbre han provocado que los alemanes retrasen al máximo la reserva de sus vacaciones de verano.
“Este año, los turistas reservaron con menos antelación que nunca. En muchos casos, se decidieron por un viaje específico ‘de última hora’ poco antes de la salida”, especificó el presidente de DRV.
Según datos de TDA, el 55% de los viajes de julio se reservaron con menos de cuatro semanas de antelación. Este porcentaje se incrementó hasta el 61% en agosto.
En cuanto a los destinos, España, Grecia y Turquía fueron los más solicitados, aunque este año los viajeros también han estado interesados en Alemania, Austria y otros países cercanos a los que se pueden viajar en tren o coche.
Satisfechos con las ayudas del gobierno
Al comienzo de la pandemia, DRV temía que hubiera una “oleada de cierres” entre las agencias pero esta no ha llegado a materializarse gracias al apoyo con las ayudas puentes y los beneficios laborales de ERTE, según especificó Norbert Fiebig.
“Ha habido muy pocos cierres en el mercado, nueve de cada diez agencias y operadores turísticos han afirmado que las ayudas del Gobierno les han permitido sobrevivir”, añadió.
Para Fiebig, el Ejecutivo alemán, “ha actuado con sensatez y ha hecho un gran trabajo” por ello, “muchos países europeos nos envidian por la forma que en nos ha apoyado”.
Por último, vaticinó que si la recuperación se materializa y continúa en los próximos meses “ya no será necesaria ninguna ayuda”.
