La aerolínea de bajo coste Vueling continúa implantando medidas con las que tratar de disminuir el peso en sus aeronaves para reducir las emisiones de CO2 que estos vierten a la atmosfera.
Para ello, la compañía de IAG ha emprendido una serie de acciones desde 2012 para reducir el impacto de sus emisiones en el medio ambiente. Entre las medidas adoptadas, la compañía sustituyó todos los asientos de su flota por los Slim Seats, un modelo mucho más ligero. Del mismo modo, digitalizó en 2019 toda la documentación de sus aviones eliminando 75 kilogramos de papel por vuelo.
La última acción que la aerolínea low cost ha llevado a cabo es la supresión de sus carros de catering por otros más ligeros con los que se reducen las emisiones de CO2 en más de 600 toneladas al año. Gracias a la puesta en marcha de dichas medidas, Vueling ha logrado reducir sus emisiones en más de 14.000 toneladas al año.
El grupo IAG al que pertenece Vueling se ha comprometido a operar el 10% de sus vuelos con combustible de aviación sostenible en el año 2030. Vueling desarrolla sus acciones en el marco del programa Flightpath Net Zero, por el que se compromete a alcanzar las cero emisiones netas de CO2 en 2050.