Continuarán teniendo restricciones los visitantes llegados de zonas declaradas “con variantes del virus”.
El Gobierno de Alemania ha anunciado que a partir del 1 de junio pondrá fin a varias de sus restricciones de viaje impuestas por la COVID-19, según ha anunciado el ministro de Sanidad alemán, Karl Lauterbach.
“Hasta finales de agosto, suspenderemos el requisito 3G de entrada”, aseguró, una normativa que exige presentar un certificado válido de vacunación, de recuperación o prueba negativa de COVID-19 para poder entrar al país. Durante la temporada de verano, se levantarán las restricciones, aprovechando la temporada alta turística y el bajo número de contagios.
Este levantamiento de las restricciones se aplicará a todos los países del mundo, exceptuando a aquellas zonas declaradas como “con variantes del virus”, que continuarán sujetas a restricciones estrictas para los viajes, como mantener una cuarentena de 14 días a la llegada del país, con independencia de la vacunación. No obstante, en estos momentos no existe ningún país que se encuentre dentro de dicha lista.
Además, Alemania está contemplando la posibilidad de ampliar el radio de vacunas aceptadas en sus certificados de vacunación, pasando a utilizar la lista aprobada por la Organización Mundial de la Salud en lugar de la de la Agencia Europea del Medicamento, más limitada y restringida.
En la actualidad, solo se permite la entrada en Alemania a quienes estén totalmente vacunados contra la COVID-19, mientras que los que no estén vacunados no pueden entrar en el país a menos que viajen por motivos esenciales.
