La reserva de experiencias de cuidado personal y de gastronomía han aumentado respecto a 2019.
El verano 2022, considerado ampliamente como el momento de recuperación del sector turístico pese a la incertidumbre respecto al otoño, ha terminado caracterizado por un gasto medio más alto, aunque algunas asociaciones de hoteleros lamentan haber registrado menor rentabilidad debido a la subida de costes.
Así, mientras que en esta última quincena de agosto se percibe una pequeña tendencia a la baja en cuanto a la cesta media, los datos a nivel general de este verano han sido positivos en comparación con el año 2021, según el último estudio de Weekendesk.es, portal especializado en escapadas temáticas.
Bridgitte Hidalgo, directora de operaciones de Weekendesk.es, explica que “hemos visto cómo a mediados de julio los hoteles han experimentado falta de stock a la hora de responder a las reservas de última hora; estamos siendo mucho más reactivos a las ofertas flash y a las promociones”.
Hidalgo añade que “aunque la mayor parte de las reservas para este verano se hayan realizado con antelación, muchos han querido aprovecharse de ofertas de última hora para alargar el verano lo máximo posible y ha sido en estos casos donde la oferta ha estado por debajo de la demanda”.
Tendencia en positivo
Si comparamos con el año pasado la tendencia se mantiene positiva empezando a despuntar desde principios de febrero. 2022 se posiciona positivo con respecto al 2021. Tanto la cesta media como la duración de las estancias han aumentado: un 21% y un 5% respectivamente.
También podemos apreciar datos positivos en el top tres de comunidades autónomas preferidas a la hora de elegir el destino. Se mantienen en los tres primeros puestos la Comunidad Valenciana con una cesta media de 506 euros, Cataluña con 359 euros y Andalucía con 355 euros.
Experiencias
El año pasado pudimos comprobar cómo los paquetes temáticos se asentaron como nueva tendencia post-pandemia: la gastronomía y el wellness fueron los más reservados por los turistas españoles. Este verano hemos mantenido esa inquietud de ir más allá del destino, de buscar aquella experiencia que complete nuestro viaje.
Sin duda, las experiencias gastronómicas y el wellness siguen liderando el ranking; en comparación con 2019, las gastronómicas aumentaron hasta un 23% sus reservas. Si lo comparamos con el verano de 2021 los datos se siguen manteniendo en alza: la categoría gastronómica aumenta un 8% y el wellness un 13%.
Reservas de última hora
Los catalanes se mantienen como los principales amantes de las escapadas temáticas y de proximidad (19,8%), seguidos de los madrileños (17,3%) y los valencianos (13,1%). De acuerdo con los datos de Weekendesk, “la pandemia parece que no nos ha quitado una pizca de romanticismo. Cuando planeamos este tipo de escapadas seguimos prefiriendo viajar en pareja, así lo han elegido este año el 77,7% de los usuarios; la familia la han elegido el 15,3% y, en último lugar, hemos elegido a los amigos (6,3%)”, detalla el comunicado de la empresa.
A mediados de julio, los hoteleros han visto cómo en ocasiones no han podido responder a la alta demanda de los que se han esperado a última hora para reservar sus vacaciones debido a que, en muchas ocasiones, ya tenían el cartel de “completo” colgado. Casi el 32% han decidido reservar sus vacaciones este año con más de un mes de antelación, un 10% más en comparación con el año 2019 y 2021.
Aunque la demanda de última hora ha sido alta, notamos un leve descenso en comparación con los años anteriores: un 12,5% decidieron esperar a última hora para reservar sus vacaciones este año mientras que, en los años anteriores, esta cifra oscilaba entre el 19,4% y el 19,9%.
