El director general de Europcar Mobility en España y Portugal, Michel Kisfaludi, afirma en AGENTTRAVEL que en España hay pocos puntos de recarga para vehículos eléctricos, lo que provoca que muchos clientes “no se animen” a alquilar un eléctrico, por mucho que lo tenga la compañía.
¿Qué estrategia en materia de sostenibilidad siguen en la empresa?
La sostenibilidad es parte de nuestro ADN desde hace más de 70 años: compartir coche en vez de tenerlo es la mejor arma para que haya menos vehículos en las carreteras. El alquiler es el camino más recto hacia una movilidad verde. Pero tan importantes como el modelo son los vehículos en sí. Hace años pusimos en marcha el plan “Una flota sostenible”, una estrategia con un objetivo claro: que al menos el 20% de nuestros vehículos en todo el mundo sean ecológicos (los que emiten menos de 50 gramos de CO2/kilómetro) a finales de 2024. En España somos la compañía de alquiler con la mayor flota ecológica en el país, con cerca de 1.500 vehículos eléctricos e híbridos enchufables repartidos por el territorio nacional.
“Los clientes son muy conscientes de su papel y cada vez se interesan más por los modelos menos contaminantes”
Sin duda, los clientes son muy conscientes de su papel y cada vez se interesan más por los modelos menos contaminantes. De hecho, según los datos de un estudio que presentamos en enero en Fitur, más del 70% de los conductores españoles quiere que el próximo vehículo que alquilen o compren sea híbrido o eléctrico. Los motivos son muy claros: son más sostenibles, evitan las ZBE (Zona de Bajas Emisiones) y ahorran en combustible. Sin embargo, sigue habiendo algunas barreras importantes, como la infraestructura de carga y, en menor medida, la autonomía y el coste. En España tenemos un gran déficit de puntos de carga, estamos a la cola de Europa. Eso es lo que hace que todavía muchos clientes no se animen a alquilar un eléctrico, por mucho que nosotros los tengamos y por muy concienciados que estén.
¿Cómo va a evolucionar el sector en esta materia?
La sostenibilidad es una tendencia imparable, todos los principales actores del sector van en una línea similar a la nuestra. Lo que está por definir es el ritmo del incremento de la flota eléctrica. Que sea más rápido o más lento dependerá de esos obstáculos que, lamentablemente, no está en nuestra mano solucionar, como la falta de una red de carga que dé seguridad y tranquilidad a los conductores.
En todo caso, hay que dejar claro que ser sostenibles no es solo tener coches eléctricos. Nuestra flota se renueva normalmente cada ocho meses, por lo que en conjunto es la más nueva del mercado y, por tanto, la menos contaminante. Sea más o menos rápida la electrificación de las flotas, somos y seremos una solución, nunca el problema.