La 45 sesión del Comité del Patrimonio Mundial de la Unesco ha aprobado la candidatura de ‘Menorca Talaiòtica. Una odisea ciclópea insular’ como Patrimonio Mundial, con lo que España suma así su inscripción número 50.
Así lo ha dado conocer el organismo en redes sociales en el transcurso de su reunión en Riad (Arabia Saudí).
Con esta nueva inscripción, España ya atesora 50 enclaves Patrimonio Mundial en su territorio, un número que lo convierte en uno de los países con más bienes registrados en esta lista y uno de los más reconocidos a nivel internacional por la variedad, riqueza y calidad de su patrimonio.
Solo los cinco primeros están por encima del medio centenar de bienes declarados Patrimonio Mundial.
Menorca registra una de las mayores densidades del mundo de yacimientos arqueológicos prehistóricos en territorio habitado. ‘Menorca Talaiòtica. Una odisea ciclópea insular’ agrupa los nueve componentes que mejor representan las construcciones de una cultura insular que evolucionó en condiciones de relativo aislamiento.
Desde mediados de la Edad de Bronce hasta la ocupación romana, se ha seleccionado una muestra de monumentos y sitios prehistóricos, incluidos asentamientos, espacios funerarios, santuarios y lugares sagrados que han sobrevivido en excelente estado de conservación.
Entre ellos, destacan determinadas manifestaciones excepcionales que son únicas y exclusivas de Menorca, tales como las navetas de enterramiento, los recintos de taula, las monumentales casas circulares y los talaiots.
Además, ‘Menorca Talaiòtica’ aporta el testimonio excepcional de una cultura prehistórica asociada al cielo. Las orientaciones de determinados monumentos permiten ilustrar la relación de esta cultura con el celaje.
Otro de los rasgos que avalan su excepcionalidad es la armoniosa convivencia que las diversas construcciones ciclópeas de la isla han desarrollado a lo largo de la historia con sus pobladores. Estos monumentos se insertan en un paisaje mediterráneo poco alterado con rasgos muy similares al de la Prehistoria.
Las sucesivas tradiciones de la piedra, los originales patrones de asentamiento y la funcionalidad espiritual de los monumentos son el reflejo de una identidad propia. Constituyen un motivo de orgullo para la isla y, por tanto, se mantienen vivos en el paisaje de la Menorca actual. De esta forma, ‘Menorca Talayótica’ testimonia actualmente en día un caso excepcional de paisaje arqueológico y monumental vivo.
La delegación española participante en la reunión del Comité ha estado formada, entre otros, por la presidenta del Govern, Marga Prohens, y el presidente del Consell de Menorca, Adolfo Vilafranca.
Baleares suma de este modo su tercera inscripción en la lista de Patrimonio Mundial junto a la ciudad de Ibiza y la Serra de Tramuntana.
Ejemplo de colaboración
En una nota de prensa, el Ministerio de Cultura y Deporte, ha resaltado que la candidatura, impulsada por el Consell Insular de Menorca, ha sido un ejemplo de colaboración entre administraciones: el Ministerio de Cultura y Deporte, el Govern y el propio Consell de Menorca.
“El apoyo institucional y el excelente trabajo técnico han sido claves para conseguir con éxito su inscripción en la Lista del Patrimonio Mundial, tras la maduración de la candidatura a lo largo de más de una década”, han indicado.
En esta reunión del Comité la inscripción del bien en la Lista Patrimonio Mundial, también se han declarado Patrimonio Mundial la antigua Jericó, llamada también Tell es-Sultan, presentada por Palestina; o el sitio natural macizo forestal de Odzala-Kokoua, en el Congo.