El 80% de los españoles viajará con seguridad y un 14% muy probablemente lo hará, según el Informe de Verano 2024 de ObservaTUR, lo que deja un total de un 94%. El estudio deja ver las “excelentes previsiones” para la temporada estival, con un importante aumento en el deseo de viajar (11 puntos más que el año pasado), aunque los agentes de viajes suavizan la euforia y advierten de señales de estabilidad en algunos parámetros analizados a causa de la situación económica. Aunque se descarta una crisis, a los viajeros les preocupa el aumento de precios, aunque se imponen la ilusión de la llegada del verano y la emoción del viaje.
Conclusiones
El informe revela que el 94% de los españoles viajará este verano: un 80% lo hará seguro y un 14%, muy probablemente. Estas cifras suponen un aumento de nueve puntos respecto a 2023. El estudio destaca, además, el incremento de 11 puntos en el grupo que lo sostiene con mayor rotundidad, pasando de un 69% a un 80%.
Por otro lado, cerca de un 7% afirma que no saldrá este verano. En concreto, el 4% dice estar convencido de que no viajará, mientras que un 3% lo considera improbable. Entre las razones se encuentra la situación económica. Asimismo, entre los que sí planean una escapada, el relax, el descanso y la desconexión son los factores de mayor peso a la hora de iniciar las vacaciones.
Y es que, al igual que años anteriores, el presupuesto es el ámbito de decisión que más dudas genera a la hora de viajar, habiendo sido solventado por un 61% de los encuestados en el informe.
Características del viajero nacional
Los españoles planifican sus viajes, mayormente, con sus parejas (76%). Este porcentaje se sitúa lejos de otras preferencias como los hijos (39%), los amigos (18%) y otros familiares (13%).
Al igual que otros ejercicios, agosto es el mes que ocupa las preferencias para viajar durante el verano (38%), seguido de julio (30%). En este sentido, el 70% de los viajeros nacionales coge entre una semana y 15 días de vacaciones, según el informe, y el 30% lo hace únicamente durante siete días, mientras que sólo el 10% disfruta de más de 15 días.
Otro rasgo de los españoles es que el 77% señala que viajará contratando alojamiento, mientras que el 23% restante pasará sus vacaciones en casa de algún familiar o amigo o en su segunda residencia. En este sentido, los que reserven lo harán sobre todo en hoteles, que es el alojamiento preferido (57%), seguido del apartamento turístico (24%).
Respecto al medio de transporte, el coche particular es la opción más elegida (49%), seguida del avión (40%) y el tren (16%), que crece significativamente. Estos datos encajan con la preferencia del destino de por españoles ya que el 65% opta por lugares nacionales, mientras que el resto se decantará por el extranjero. Precisamente, en el ámbito español, los principales puntos de interés son la costa mediterránea (18%), Andalucía (17%) y el Cantábrico (12%). En el plano internacional destacan las ciudades europeas (13%) y las rutas culturales por Europa (8%).
El motivo más citado en el informe para justificar la elección del destino son el coste (20%) y la oferta de ocio y de gastronomía (19%). Con todo, los viajes de ‘sol y playa’ son la opción favorita para los turistas nacionales (42%). Mientras, los viajes rurales ganan adeptos (11%), por encima de otras fórmulas como el turismo de relax y bienestar (5%), turismo experiencial (4%), ecoturismo (2%) y deporte o aventura (1%).
Presupuesto medio por persona
El presupuesto medio por persona para las vacaciones de verano será de 677 euros, que crece en 51 euros respecto a 2023. El gasto se destinará principalmente al alojamiento (33%), gastos en restauración (24%) y transporte (19%).
Opinión de los agentes
Los agentes de viajes aseguran que los turistas están ilusionados por viajar y hacer con los mejores precios intentando obtener el máximo ahorro. Asimismo, la subida de precios es el principal riesgo a considerar (82%), aunque cae 15 puntos en comparación al año pasado. El aspecto que sí crece como preocupación son las guerras de Ucrania y Oriente Medio (30 puntos más) y los temores a las amenazas globales (37 puntos). También crece la preocupación por la situación política nacional, que sube 13 puntos y alcanza su máximo histórico.
En comparación con el primer semestre, las expectativas para el segundo son positivas, aunque la confianza es algo menor que la reflejada en el verano anterior en base a algunos parámetros. Y es que, aunque las previsiones sobre el empleo mantienen una buena expectativa, se encuentra por debajo de 2023.
En este sentido, las predicciones sobre las reservas apuntan a la estabilidad y son inferiores a las del verano pasado, aunque evoluciona favorablemente la contratación de seguros.
Para las vacaciones, se confía en que se eleven todos los tipos de viajes excepto es los de más de siete días, que disminuirán (19 puntos menos). Así, se espera un alza en destinos tanto nacionales como internacionales, pero las previsiones de crecimiento se reducen respecto al verano anterior. Dentro de nuestras fronteras se contempla un crecimiento en playas insulares, mientras que en las peninsulares y en espacios naturales la expectativa tiende a estabilizarse. Asimismo existe cierto pesimismo en cuanto a las reservas de destinos rurales.
Los agentes de viajes también auguran un alza en destinos urbanos, mientras se espera que los parques temáticos y los circuitos nacionales disminuyan. En este contexto, se anticipan aumentos en reservas de ciudades europeas y de cruceros, mientras que en otros productos (como circuitos europeos y parques temáticos) la tendencia conduce a la estabilidad. Entre los destinos favoritos, los profesionales esperan que el Caribe gane peso entre los viajes de larga distancia a la vez que los destinos de aventura siguen su tendencia al descenso.
De media, la proporción de reservas ya realizadas se sitúa en torno al 41%. Respecto a la temporada pasada, se piensa que las contrataciones se retrasarán (42%) o bien se mantendrán (40%).