El CEO de Minor Hotels Europa & Américas, Ramón Aragonés, afirma que hay muchas fórmulas para regular el crecimiento indiscriminado de las viviendas de uso turísticas ya que perjudica al sector hotelero. Además, afirma a AGENTTRAVEL que el modelo turístico actual se encuentra en plena transición para satisfacer las demandas de un mercado cada vez más sofisticado.
¿Qué preocupaciones tienen el sector hotelero ante el auge de viviendas de uso turístico?
Asistimos con preocupación al crecimiento incontrolado de las viviendas de uso turístico, muchas de ellas ilegales. Un 13% de los turistas se han alojado en ellas en los cuatro primeros meses del año, con un crecimiento del 37%, según los datos del INE. Como esas cifras se concentran en las principales ciudades, empiezan a darse casos de masificación que, a su vez, alientan la turismofobia.
La decisión del Ministerio de Vivienda de limitar los alquileres en las zonas más tensionadas puede ser un primer paso. Recientemente nuestro país vecino Francia ha anunciado que otorgará a los alcaldes la autoridad para restringir el alquiler vacacional a un máximo de 120 días al año. Nueva York ya dio el año pasado un primer paso, al impedir alquilar casas por menos de treinta días, salvo aquellos casos donde el propietario esté presente. Hay muchas fórmulas para regular un segmento cuyo crecimiento indiscriminado perjudica al sector hotelero y también a la oferta turística del conjunto del país.
¿Cuáles son los retos del sector hotelero?
El modelo turístico actual se encuentra en plena transición para satisfacer las demandas de un mercado cada vez más sofisticado. Esta evolución abarca desde la implementación de tecnologías avanzadas hasta la adopción de prácticas sostenibles. Además, observamos un notable aumento en la demanda de experiencias personalizadas y exclusivas.
Asimismo, en los próximos años, la industria turística se enfrentará a una serie de nuevos desafíos que requerirán una fuerte capacidad de adaptabilidad e innovación por parte del sector.
Entre estos retos, destacaríamos la entrada de los países asiáticos como nuevos emisores turísticos hacia Europa –especialmente hacia España–; la consolidación de nuevos destinos turísticos, y la integración tecnológica en la oferta hotelera.
¿Qué previsiones tienen para la temporada de verano?
Las reservas nos permiten ser razonablemente optimistas. La ocupación y los precios siguen en aumento, gracias a la fuerte demanda tanto en el sector de ocio como en el de negocio en todos los países. Se mantiene una mejora significativa en los niveles de ocupación en Benelux y Europa Central, y una sólida evolución del negocio en España e Italia.
Además, se registra un incremento aproximado de precios del 5% en relación con el mismo periodo del año anterior. Es importante destacar que la mayoría de nuestro porfolio en España es urbano, por lo que el tercer trimestre no representa una temporada alta para estos establecimientos hoteleros.