La Asociación Hotelera y Extrahotelera de Tenerife, La Palma, La Gomera y El Hierro (Ashotel) ha lamentado la decisión del Gobierno de Canarias de legalizar las viviendas de alquiler vacacional, ya que “no crea empleo en el sector turístico, en muchos casos se lleva a cabo en el marco de la economía sumergida y amenaza los puestos de trabajo legalmente existentes”.
A través de un comunicado, Ashotel ha dicho que este planteamiento está compartido por el principal sindicato con representación en el sector hotelero, CCOO, y añade que “bajo el disfraz de comercio colaborativo con el que se pretende vender esta actividad se esconden verdaderos negocios encubiertos que no pagan ningún tipo de impuesto”.
Según la patronal, casi 90 comités de empresa de establecimientos turísticos de Canarias, que representan a unos 11.200 trabajadores, han apoyado este planteamiento con el envío de cartas al presidente del Gobierno canario, Paulino Rivero, advirtiendo del daño que esta acción supondrá al sector legalmente constituido.
Asimismo, advierte de que la gran mayoría de estas viviendas no reúne los estándares mínimos de calidad, seguridad y accesibilidad como para ofrecerse como alojamiento turístico, al tiempo que carecen en muchos casos de permiso de las comunidades de propietarios de inmuebles residenciales en las que se ubican algunas de estas viviendas, ni registros de hojas policiales.
El presidente de Ashotel, Jorge Marichal, alerta del peligro de que esta actividad suponga un “efecto llamada” de la burbuja inmobiliaria, puesto que “se podría abrir la peligrosa vía de construir casas exclusivamente destinadas a este fin”.