El ‘Al Andalus’ registró un nivel de ocupación del 70% en 2014.
La oferta de trenes turísticos de Renfe esperan superar los 2.000 pasajeros este año impulsados por un crecimiento del 15% de la ocupación en el tren turístico Al Andalus, una de las propuestas que más éxito ha tenido esta temporada, según el responsable de trenes turísticos de Renfe, Francisco Javier Díaz.
El pasado año destacó por registrar un nivel de ocupación muy positivo en todos los trenes turísticos que gestiona la operadora Renfe en el que destacaron especialmente el alto nivel de ocupación en los trenes en el norte (90%), en el de la Robla y el Al Andalus (70%).
En total, el año 2014 cerró con un total de 1.311 pasajeros en los trenes turísticos del norte, mientras que Al Andalus acogió a 714 viajeros, siendo los principales mercados internacionales Alemania, Estados Unidos, Gran Bretaña, Australia, Suiza, Brasil, China, y Rusia. En menor medida, contribuyeron los mercados extranjeros de Japón, México, Chile y Argentina.
Respecto al perfil del usuario, los trenes transcantábricos clásicos registraron el pasado año un 47% de pasajeros internacionales, mientras que en el Transcantábrico de Gran Lujo los extranjeros supusieron un 53%. En conjunto, los trenes turísticos de Renfe fueron ocupados por un 51% de pasajeros internacionales frente a un 44% de nacionales.
De cara a 2015, Díaz espera que la ocupación supere el 90% en los trenes del norte y aumente un 15% en los del sur, hasta alcanzar el 85%, según comunicó en una presentación ante medios especializados este martes.
“Cruceros sobre raíles”
Para Díaz, los trenes turísticos de Renfe –Transcantábrico, Al Andalus y La Robla– cuentan en su conjunto con más de 30 años de vida y son “cruceros sobre vías, joyas del patrimonio histórico al permitir contemplar el paisaje y la gastronomía nacional”, con Ramón Celorio al mando de los sabores.
Como novedad en 2015, el viajero podrá optar por el Tren del peregrino, con cuatro salidas en agosto y coches cama, que saldrá de Madrid con duración de cinco días, desayuno y dos cenas incluidas, pudiendo el pasajero recorrer parte del viaje andando o en bicicleta en tres tramos.
Se trata además de trayectos en los que el viajero “no debe preocuparse por nada más que de disfrutar”, ya que el billete incluye el transporte en Ave y Alvia desde cualquier ciudad de España a la estación de salida, así como la estancia, las comidas, excursiones, traslados, entradas y guías turísticos, con precios desde los 500 euros a más de 4.000 euros.
Temporada de primavera
El 28 de marzo arranca la temporada de primavera, con el ‘Transcantábrico’ y su tren clásico (46 pasajeros) y de gran lujo (28 pasajeros). Las estancias cuentan con camas de 1,50 metros por 2 metros, wifi, minibar e incluso sauna.
Por otro lado, el tren medieval cuenta con 11 salidas programadas a partir del 25 de abril, además del tren turístico que recorre Extremadura con cuatro rutas entre abril y mayo y precios de 20 euros para los niños.
A ello se suman los trenes turísticos de Galicia, con 47 salidas en siete rutas asociadas a las denominaciones de origen de la región, a los que se suman los viajes desde San Sebastián a Santiago de Compostela, con 23 salidas de ocho días y siete noches.
En especial, destacar el camino de León a Bilbao recorre una línea ferroviaria de más de cien años de antigüedad y el tren de La Robla, que por su parte, explora la costa verde, desde Bilbao a Oviedo.
Tarifa mini en Andalucía
Para viajes más informales, los pasajeros pueden optar por el Al Andalus, que este año cuenta con 20 salidas de seis días y cinco noches, atravesando Sevilla, Cádiz, Ronda, Jérez de la Frontera, Granada, Linares, Úbeda, Baeza y Córdoba.
La tarifa mini llega a Andalucía tras el éxito en los trenes Transcantábricos, cuya duración es de cinco días y cuatro noches. Existe además un descuento del 10% en los billetes adquiridos más de seis meses antes de la salida. Las empresas y agencias pueden optar por trenes chárter.
“Hoy día la prisa nos reclama velocidad, sin disfrutar del presente pensando en el futuro. Hay viajes en que nos gustaría que el tiempo se detuviera: éste es uno de ellos”, aseguró Díaz.
