La Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos (UPTA) ha reclamado que las políticas turísticas en España incorporen “medidas más ambiciosas” para dinamizar el turismo rural, un segmento donde la ocupación media en temporada alta no supera el 25%.
En un comunicado, UPTA señala que el turismo rural resulta “fundamental” para la economía rural, en general, y recuerda que es un “instrumento principal” para evitar la desertización problacional en muchas zonas de nuestro país.
Pese al aumento de pernoctaciones registrado en julio en alojamientos rurales (+11,6%), la ocupación media se sitúa en el 24,8%, algo superior en los fines de semana (35,9%). De esta baja ocupación solo se salvó Baleares, con el 64,4% del total de plazas ofertadas.
En cuanto a los precios, la tarifa normal se redujo un 0,34%, con un pequeño repunte del 0,15% en las tarifas durante el fin de semana.
Para UPTA, el gran reto del sector sigue siendo “atraer a los viajeros residentes en el extranjero”. Del total de viajeros de 76.825 viajeros que optaron por este tipo de alojamientos, solo 365.161 fueron extranjeros.
Más de 16.000 alojamientos rurales en España
La mayoría de las comunidades autónomas registran ocupaciones por debajo del 50%, aunque con una mejora aproximada de 10 puntos de media durante los fines de semana.
En la actualidad, se contabilizan en España un total de 16.011 alojamientos rurales, que ofrecen 152.000 plazas y dan trabajo a 24.323 personas.
Desde julio de 2014, el número de alojamientos rurales ha retrocedido un 0,37%, pero las plazas han aumentado ligeramente (+0,24%), al igual que el persona ocupado (+1,46%).
En 2014, la demanda del turismo rural internacional hacia España creció un 12%. En febrero, el Gobierno lanzó el Plan Integral de Turismo Rural 2014, en colaboración con las comunidades autónomas, para atraer más visitantes extranjeros en este segmento.