¿Existe alguna rama del turismo que no haya sido explotada? ¿Un segmento con infinitas posibilidades en el que pocos se hayan decidido a emprender? En España hay aproximadamente 9.500 agencias de viajes, unos 15.000 hoteles, numerosas aerolíneas y una buena cantidad de turoperadores.
Pero, ¿qué sucede con el producto turístico? “Es un tema por profesionalizar en nuestro país. Está muy atomizado, hay mucha empresa pequeña, mucho autónomo y mucha informalidad en algunos temas”, asegura a la revista AGENTTRAVEL el director de Operaciones de Civitatis, Enrique Espinel.
La empresa, que pone en contacto a los proveedores de producto turístico exclusivamente en español con los clientes, trabaja en 70 países y el año pasado estuvo cerca de facturar 29 millones de euros.
Espinel explica que este éxito ha llegado porque, aunque los tours y actividades tradicionalmente se contrataban en el destino, “poco a poco la gente va aceptando este modo de distribución y comercialización online”.
Para un guía, por ejemplo, resulta más complicado “crear una web, posicionarla y vender su producto” que trabajar con un intermediario que le dé acceso a miles de clientes.
Transformar el producto
Para el directivo de Civitatis, la aceptación de su modelo de negocio es tan notoria que asegura que actualmente están en “un punto” en el que les toca “rechazar” a proveedores.
Sin embargo, el director de Turismo del Ayuntamiento de Madrid, Miguel Sanz, cree que aunque hay oferta, la capital española “tiene una asignatura pendiente en la transformación de los servicios que consume un madrileño en productos turísticos”.
Miguel Sanz insiste en que “no falta producto turístico”, sino que el problema está en su comercialización
“Se ha creado un producto turístico porque sí que existían los bares de tapas en Madrid, pero no los tours en los que hay una persona que te lleva y te explica por qué se comen, los platos típicos, etc.”, manifiesta Sanz.
Civitatis, que es una de esas empresas que ofrecen tours de tapas, cuenta con dos tiendas en Madrid cuyo objetivo es “ayudar a promocionar y a divulgar la oferta turística que hay en una ciudad” porque Espinel coincide con Sanz en que “muchas veces hay actividades interesantes, pero si no llegan al público o no se ponen facilidades, es posible que acaben fracasando”.
Experiencias empaquetadas
Turismo del Ayuntamiento de Madrid, por su parte, tiene dos formas de incentivar el producto turístico. La primera son las propuestas de experiencias temáticas que cuelgan en su sección Madrid Explora con la intención de que cualquier agencia o turoperador pueda desarrollarlas para sus clientes.
“Tenemos 50 experiencias empaquetadas, como ‘El Madrid del Arte’, que dan pistas sobre lo que se puede hacer en la ciudad”, explica Miguel Sanz.
Enrique Espinel considera que el producto turístico en España está “muy atomizado” y es “un tema por profesionalizar”
Madrid Explora busca motivar la creación de producto turístico y, además, proporciona herramientas a las agencias de viajes. También Civitatis ofrece un lugar a las minoristas en este nuevo mercado por explorar.
Y es que, aunque según Espinel la compañía nació “como B2C para facilitar al cliente los servicios en destino”, han acabado desarrollando una plataforma en la que ya hay 3.000 agencias que venden sus actividades y perciben una comisión.
Proceso de acompañamiento
La segunda forma que tiene Turismo del Ayuntamiento de Madrid para incentivar el producto turístico es realizar un proceso de acompañamiento a los proveedores de servicios para informarles sobre cómo pueden adaptar su producto a la demanda turística.
El organismo detectó que muchos visitantes les solicitaban productos, como las clases de cocina española de un día, que existen “pero no se comercializan en los puntos de venta habituales que utiliza un visitante”, afirma Sanz.
Por eso, intentan “hacer que el sector económico madrileño mejore su penetración en los canales de distribución y comercialización de productos turísticos”, a través de iniciativas como realizar una sesión informativa para las Asociaciones de Restaurantes de Madrid en colaboración con Mahou y TripAdvisor para que aprendan cómo pueden mejorar su presencia en esta plataforma.
Presencia en TripAdivsor
La visibilidad en TripAdvisor puede marcar la diferencia entre ese producto del que hablaba Espinel, que acaba fracasando porque se desconoce, de otro que tenga éxito.
Así, estar entre los productos que consiguieron uno de los ‘Travellers Choice Experiencias’ que repartió la compañía en base a las reseñas de los viajeros, puede ser una buena forma de dar a conocer un producto turístico.
Entre las experiencias que copan el top 10 en España, destacan un tour de medio día en bicicleta por Barcelona, una visita de medio día a La Alhambra o el bus turístico de Madrid. Este último, es uno de los dos productos que gestiona directamente Turismo del Ayuntamiento de Madrid y que, según Sanz, “es muy exitoso”.
TripAdvisor, Fitur y el periódico ‘El Mundo’ reconocen en sus premios anuales a los mejores productos turísticos
Pero no solo TripAdvisor da premios a los mejores productos turísticos. Fitur entrega unos galardones que este año han recaído en su categoría nacional en las #estacionesgastronomicas de Cudillero, la Expedición Douro en Kayak, de Zamora, los Parques Naturales de Galicia y el Astroturismo de La Palma.
El periódico El Mundo, por su parte, reconoció en sus premios ‘El Caminante’, a la Gran Senda de Málaga como producto turístico del año y, sin salir de Andalucía, se puede encontrar uno de los ejemplos más destacados de creación, o más bien recuperación de una atracción turística:?El Caminito del Rey.
Todos estos reconocimientos fomentan el turismo de calidad, crean puestos de trabajo e impulsan, en definitiva, un destino.
Impulsar el turismo
Enrique Espinel incide en que el modelo de negocio de Civitatis es “muy escalable”, algo que demuestra su ambicioso objetivo de crecimiento –esperan alcanzar los 45 millones en ventas en 2018, un 64% más que el año anterior–. Turismo del Ayuntamiento de Madrid, consciente de que la calidad y cantidad de experiencias ayuda a potenciar las cualidades de un destino, apoya y acompaña a quien emprenda en el producto turístico.
Algunos organismos y empresas ya premian la calidad e innovación del mismo y numerosos destinos quieren desmarcarse de lo convencional invirtiendo en el desarrollo de nuevas atracciones o actividades.
Por eso, ante las previsiones de estancamiento en el turismo, emprender en el desarrollo y profesionalización del producto turístico, un segmento que aún no ha sido demasiado explotado, es sin duda una apuesta de futuro.