La Comisión Europea ha dado luz verde este martes a la compra del 31% de Virgin Atlantic por parte del grupo franco-holandés Air France-KLM, que de esta forma compartirá el control de la firma con Delta Air Lines (49%) y Virgin Group (20%), según ha informado en un comunicado la institución europea.
Los servicios de Competencia del Ejecutivo comunitario han autorizado sin condiciones la operación al concluir que no plantea problemas en el Espacio Económico Europeo (EEE) en ninguno de los mercados analizados.
En concreto, Bruselas ha determinado que el control conjunto de Virgin Atlantic no plantea problemas sobre la competencia en el transporte de pasajeros a pesar del “pequeño” número de rutas con una “elevada” cuota de mercado combinada.
La Comisión considera, en este ámbito, que Virgin Atlantic, Delta y Air France-KLM no son rivales y seguirán enfrentándose a otros competidores en aquellas rutas en las que las actividades de las tres aerolíneas se solapan.
Air France-KLM ya había llegado a un acuerdo con Virgin Group para adquirir el 31% de Virgin Atlantic por 220 millones de libras (250 millones de euros) en mayo de 2018.
Bruselas descarta efectos negativos en la competencia
Además, la investigación ha descartado que la cartera combinada de slots de las tres compañías vaya a evitar que otras aerolíneas se establezcan o expandan su presencia en los aeropuertos de Manchester y Londres Heathrow.
Por otro lado, en relación al transporte de mercancías, Bruselas ha descartado potenciales efectos negativos sobre la competencia porque Air France-KLM, Delta y Virgin Atlantic no son “competidores cercanos” en este mercado y porque seguirán teniendo rivales “fuertes” como Luftansa o Cargolux.
Finalmente, el Ejecutivo comunitario ha concluido que la operación tendría un impacto “limitado” en el mercado de servicios de mantenimiento, reparación y revisión de aeronaves.