Representantes de turismo de las ciudades de Madrid, Sevilla y Barcelona han destacado la importancia de realizar acciones conjuntas de promoción para aumentar su repercusión en destinos emergentes este viernes en el Tourism Innovation Summit (TIS2020), celebrado en Sevilla.
La concejala delegada de Turismo del Ayuntamiento de Madrid, Almudena Maíllo; el presidente de Turisme de Barcelona, Eduard Torres; y el delegado de Turismo del Ayuntamiento de Sevilla, Antonio Muñoz, han participado en la mesa ‘Destinos Turísticos Inteligentes, o cómo convertirse en una referencia del turismo internacional’, moderada por el director de AGENTTRAVEL, Juan Carlos Cavero.
En esta mesa, los representantes han explicado el camino que han seguido para convertirse en una ‘smart city’ y han coincidido en que la innovación y la sostenibilidad son dos factores fundamentales para encarar la recuperación tras la pandemia.
Las tres ciudades llegaron a enero de 2020 con muy buenas perspectivas de futuro tras batir sus respectivos récords de turistas recibidos en 2019. A pesar de que la crisis provocada por la COVID-19 ha sido un duro golpe para el sector turístico, los representantes aseguran que durante el parón han tenido tiempo para pensar en cómo mejorar sus estrategias.
El Ayuntamiento de Madrid está trabajando para ofrecer nuevas experiencias con el objetivo de dar a conocer más puntos de interés de la ciudad. “Cada vez el turismo va a ser más experiencial”, afirma Maíllo.
Por su lado, desde el parón, en Sevilla han desarrollado la ‘estrategia 8’ con la que, pensando en el día de después, han localizado las prioridades, entre las que destaca la sostenibilidad y la digitalización.
La seguridad, lo primero
La concejala delegada de Turismo del Ayuntamiento de Madrid apuesta por los corredores turísticos. Madrid ha lanzado una campaña de promoción con la que transmiten que la ciudad está preparada para recibir a los turistas. “Ahora falta que abran las fronteras”, asegura Maíllo que comenta que los elementos de los turistas para escoger un destino en la actualidad son la confianza, la seguridad y la tecnología.
Antonio Muñoz ha manifestado su satisfacción por cómo se está desarrollando el TIS 2020 y afirma que “aunque hemos tenido dudas, no nos arrepentimos de haber seguido adelante con la decisión de llevar a cabo el evento”.
Tomando por ejemplo el TIS 2020, el delegado de Turismo del Ayuntamiento de Sevilla argumenta que es posible realizar un evento de carácter internacional a pesar de las restricciones, siempre tomando las medidas adecuadas que aportan una garantía de seguridad.
Tecnología y recolección de datos
Como ejemplos de ‘smart city’ que son estas tres ciudades, la tecnología ha tenido un papel fundamental en la mesa y se ha puesto el punto de mira en la recolección de datos para conocer mejor al cliente.
Muñoz señala que “esta pandemia ha acelerado la necesidad que los destinos turísticos tienen de innovar y desarrollar las nuevas tecnologías en todos los ámbitos. Es una revolución tecnológica que ha venido para quedarse, al margen de la pandemia”, afirma Muñoz.
La tecnología ha facilitado la interconexión constante con los actores turísticos que quieren conocer lo que ocurre en el destino. El reto está en cómo utilizar los datos, hay que fijar objetivos, “porque datos ya hay”.
“Nos hemos dado cuenta cómo a través de las nuevas tecnologías nos teníamos que comunicar de formas diferentes, y es uno de los ámbitos en los que hemos aprovechado el parón”, asegura Maíllo.
Unión de las ciudades
El camino para el futuro de las ‘smart city’ pasa por “la tecnología y la recolección de datos” con los que estar en contacto con el visitante en tiempo real y para que las empresas privadas tengan acceso a los datos para conocer mejor a su cliente y mejorar su oferta.
Y para facilitar esta labor, el presidente de Turisme de Barcelona ha propuesto a sus homólogos sinergias “ante la falta de visibilidad de las ciudades”.
Ante esta propuesta, Maíllo afirma que “estos momentos la unión de todos, y ante la competencia que va a haber, me parece muy buena idea”. Muñoz por su parte cree “que las ciudades españolas tenemos un potencial que si trabajamos juntos, en largas distancias podemos tener un efecto encomiable”.
Convivencia de visitantes y residentes
En Barcelona, en el mes de enero debatían si querían superar el número de visitantes debido a que la actividad de estos se concentra en zonas muy concretas y genera molestias en la vida de los residentes. A partir de la pandemia, se ha apartado este debate para volver a hablar de cómo atraer al turismo otra vez, en vez de cómo gestionarlo.
En este sentido, Eduard Torres asegura que el mayor reto que tiene Barcelona es intentar que cuando vuelvan las cifras anteriores, la relación entre el residente y el visitante sea lo más satisfactoria para ambas partes. Por ello, apuesta por “escoger el tipo de visitante, desestacionalizar y desconcentrar la actividad turística”.
En este sentido, el delegado de Turismo del Ayuntamiento de Sevilla apunta a un claro problema de concentración de visitantes en ciertas zonas la ciudad, “en las que sí viven familias”. Para remediarlo propone dos soluciones: que haya un representante vecinal en la mesa en la que se reúnen los agentes turísticos y la tecnología para descongestionar lugares como museos a través de la gestión de la información. Apunta, sin embargo, que “la tecnología hay que saber usarla, no te resuelve nada si no conoces tus objetivos”.
Sostenibilidad
Por último, los representantes se han referido a la sostenibilidad como factor clave en las estrategias de futuro.
La concejala delegada de Turismo del Ayuntamiento de Madrid asegura que hay que trabajar en un nuevo modelo turístico sostenible que ayude a toda la ciudad. Para lo que considera imprescindible la colaboración público-privada.
Muñoz sostiene que hay que hablar de sostenibilidad “pero sin prostituirla”. Advierte de que hay “muchísimo abuso de sostenibilidad” en referencia a productos que llevan dicha etiqueta, pero “simplemente es marketing”.
Coincide Torres, quien habla de una “fase de certificación” en la que nos encontramos ahora, pero “queda casi todo por hacer en sostenibilidad”. Para avanzar, “el primer paso es medir la huella de carbono” para poder elaborar “las medidas correctoras”.
“Cuando decimos que el siglo 19 fue el de los grandes imperios el 20 el de los grandes estados y el 21 el de las ciudades”, concluye Muñoz.