Reino Unido se está planteando la implantación de un pasaporte de vacunación para los viajes internacionales, a pesar de haber endurecido esta misma semana las medidas y restricciones de los viajes, según ha declarado el Secretario de Estado de Transporte, Grant Shapps en la BBC.
El ministro responsable de la vacunación, Nadhim Zahawi, ha afirmado esta semana que el gobierno de Reino Unido no estaba considerando la aplicación de los pasaportes digitales de vacunación al considerarlo una medida “discriminatoria”.
Sin embargo, el CEO de IATA, Alexandre de Juniac, confirmó que se encontraban en conversaciones con el gobierno británico que estaban siendo “muy fructíferas”, aunque insistió en que era pronto para asegurar nada y agregó que no había una fecha concreta para la adopción de esta medida, pero que el IATA Travel Pass estará operativo a finales de marzo.
Por otro lado, Grant Shapps ha avisado de que es “demasiado pronto” para que los británicos reserven vacaciones de verano en el país o en el extranjero en el marco de la pandemia de COVID-19.
Shapps ha justificado que desconoce cómo estará el país “en términos de casos, muertes y vacunación” para verano, aunque ha matizado que Reino Unido mantiene conversaciones con otros países para establecer un “sistema internacional” para verificar si los turistas se han sometido a pruebas diagnósticas de la COVID-19 o están vacunados.
Vacaciones prohibidas
“Por favor no reservéis vacaciones”, ha pedido, recalcando que “simplemente” no sabe “la respuesta a la pregunta de cómo estaremos este verano”. “Es demasiado pronto para dar esa información”, ha incidido, antes de hacer hincapié en que “el mejor consejo es que no hagan nada en este punto”.
Bajo las normas del confinamiento actual en Reino Unido los viajes por ocio están prohibidos, aunque un descenso en los contagios diarios ha abierto la puerta a la esperanza de la vuelta a una normalidad relativa para primavera o verano.
Las palabras de Shapps han causado revuelo en Reino Unido. Según la BBC, algunos de los parlamentarios del partido del primer ministro, Boris Johnson, han señalado que el Ministerio de Salud les había asegurado en privado que el vigente sería el “último” confinamiento y que, una vez vacunados los más vulnerables, se recuperaría cierta normalidad para Semana Santa.
Ahora, tras las palabras de Shapps, existe la preocupación de que el Gobierno implante medidas de forma improvisada y se teme que la ‘hoja de ruta’ de Johnson para salir del confinamiento sea bastante vaga.
El portavoz del Ejecutivo británico, James Slack, se ha limitado a señalar que, actualmente, las vacaciones no están permitidas pero, cuestionado sobre si Shapps ha acertado pidiendo a la población que no reserve vacaciones, ha afirmado que “por supuesto, eso es elección de los individuos”, según informa The Guardian. Slack ha matizado que la semana del 22 de febrero el Gobierno establecerá un plazo para relajar las restricciones.