Braintrust ha afirmado que reducir la estacionalidad en España es clave para la recuperación y la vuelta al empleo turístico, tras la elaboración de un índice de estacionalidad del turismo extranjero en el país.
En concreto, la firma de consultoría ha asegurado que la nueva etapa turística supone una oportunidad para transformar el modelo actual hacia un enfoque de sostenibilidad, “eje principal de los planes turísticos del futuro y condición indispensable para recibir ayudas de los fondos europeos”.
Islas Baleares es la comunidad autónoma que mayor estacionalidad presenta, seguida a una “considerable” distancia de la Comunidad Valenciana y Cataluña, ambas con valores similares.
En el otro extremo se sitúan islas Canarias y Madrid, con un indicador de estacionalidad muy bajo, lo que refleja que el gasto que reciben de turistas extranjeros es muy similar en todos los meses, aprovechando y optimizando la afluencia de visitantes a lo largo de todo el año.
Para el co-director del Barómetro Turístico y Director de Turismo de Braintrust, Ángel García Butragueño, el índice de estacionalidad reflejado significa el nivel de dependencia de un destino en un turismo concentrado y masivo, que impide un modelo sostenible.
Según Butragueño, “la previsible desescalada tras la pandemia no nos debe hacer correr en una búsqueda desesperada de los turistas de siempre, sino aprovechar para transformar el enfoque del modelo turístico, como ya están haciendo muchos de nuestros clientes”.
Medidas para reducir la estacionalidad
Para reducir la estacionalidad, los destinos pueden poner en marcha determinadas estrategias, según Braintrust. En primer lugar, segmentar el mercado y trabajar con diferentes públicos objetivos, considerando tanto sus motivaciones como su origen o la experiencia que buscan.
Otra propuesta es ampliar la propuesta de valor, diseñando productos y servicios que incentiven la visita en momentos valle, incrementando en la oferta a los diferentes actores del ecosistema turístico del destino, diversificando los recorridos tradicionales por las ciudades con nuevas rutas.
Por último, la consultoría ha señalado que los destinos deben innovar en la forma de comunicar y vender el destino tanto en fondo como en forma, así como en los canales adecuados al segmento de público objetivo.