Los representantes de las agencias de viajes y los hoteles piden al Gobierno y los agentes sociales una prórroga de los ERTE en las mismas condiciones que las actuales, lo que les permitiría proteger los empleos y las empresas.

A pesar de estas exigencias, por el momento el Ejecutivo de Pedro Sánchez apuesta por que los ERTE que ya están en marcha no se prorroguen automáticamente. En su lugar, plantea que las empresas que aún tengan trabajadores en expedientes tengan que volver a cursar la solicitud.

El Ministerio de Inclusión y Seguridad Social ya ha avanzado que el objetivo del Gobierno es que estos nuevos ERTE estén centrados en la formación de aquellos trabajadores que tienen más difícil reincorporarse a su empleo.

Cabe recordar que el Ejecutivo, los sindicatos y los empresarios comenzaron ayer sus negociaciones para prorrogar los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) más allá del 30 de septiembre, previsiblemente hasta finales de año.

Por su parte, CC OO explicó que “no será una prórroga automática”, ya que “habrá que solicitar nuevos ERTE, y hay que determinar el mecanismo para hacerlo”.

El sindicato ha planteado que esta se extienda hasta el 31 de enero, además de “modificar el contador a cero y recuperar la prestación extraordinaria para fijos discontinuos”.

Para Carlos Garrido, presidente de la Confederación Española de Agencias de Viajes (CEAV) es “fundamental para las agencias de viajes que se prolonguen las exoneraciones de los ERTE por lo menos hasta el próximo mes de marzo del 2022 puesto que no están facturando ni siquiera el 50 % de su producción habitual”.

“Somos el sector más afectado que por los motivos de nuestra actividad vamos a tardar todavía un poco de tiempo en reanudar nuestra actividad y no estamos en disposición de asumir los costes fijos de nuestra estructura y por lo tanto necesitamos prolongar esta protección todavía durante unos meses más”, añade.

Por otro lado, para Garrido es “fundamental” que se pongan encima de la mesa fórmulas que permitan a las empresas restructurar sus costes fijos durante el tiempo que falta hasta que se recupere la actividad “sin perjuicio de que las empresas se compromentan a recuperar a las plantillas pero en un plazo más largo acorde con la producción y la facturación de nuestros negocios”.

Un verdadero plan de rescate

Por su parte, Martí Sarrate, presidente de la Asociación Corporativa de Agencias de Viajes Especializadas (Acave), recuerda que aún existen unos 15.500 empleados afectados por ERTE, total o parcial y que en estas fechas comparado con las del 2019 se han perdido un total de 12.583 empleos lo que representa un retroceso del 18,4% pasando de 68.495 a 55.913 empleos actualmente.

Sarrate afirma que desde que comenzó la crisis, los ERTE han sido una de las principales ayudas para las empresas. Sin embargo, denuncia que han ido perdiendo “ventajas y bonificaciones cada vez que se iban prorrogando”.

“Han mantenido a nuestras empresas en una situación de incertidumbre, dado su carácter temporal sujeto a continuas prórrogas que en la mayoría de ocasiones no se han aprobado hasta llegar al tiempo límite de su vencimiento, dando poco margen de planificación”, lamenta.

Además apunta que, “los ERTE no son gratuitos pues implican la cláusula de mantenimiento de empleo que salvo que se aprueben normas que flexibilicen la recuperación de los puestos de trabajo, “supondrá que las agencias tendrán que devolver las bonificaciones aplicadas, lo que supondría el cierre automático de la gran mayoría de ellas”.

Por todos ello, exige que se mantengan las exoneraciones iniciales de los primeros ERTE, ya, según su opinión “no tiene lógica que una empresa con personal en ERTE tenga que pagar un 60% de la Seguridad Social”.

“La petición del sector es de un verdadero plan de rescate total, para dar continuidad a muchos puestos de trabajo y de pymes y micropymes pues la situación actual es insostenible , pues este año 2021 se facturara un 70% menos que en el año 2019”, apunta.

Hoteleros: priorizar al sector turístico

Por su parte, la Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos, (CEHAT) señala que es necesario “que se prorroguen los ERTE manteniendo las condiciones actuales y que se priorice al sector turístico”.

Por ello, su presidente Jorge Marichal ha destacado que es “vital” que esa red de seguridad que ofrecen los ERTE permanezca, ya que ahora se empieza a notar “el abandono de la actividad del turista nacional”.

Por su parte, la Asociación Empresarial Hotelera de Madrid (AEHM) ha apunta que una prorroga de los ERTE en las “mismas condiciones” permitiría proteger empleos y la actividad empresarial de un sector “clave” en la economía de la región.

A pesar de que, según datos de la asociación, la situación del sector hotelero en Madrid es más positiva que hace un año, aún está “muy lejos” de los niveles de 2019. Según ha indicado en un comunicado, las cifras de la campaña de verano muestran una ocupación media del 46,17% frente al 72,81% que se obtuvo antes de la pandemia. Sin embargo, al realizar el cálculo sobre el total de la planta hotelera, dicha ocupación no llegaría al 20%.

"En la asociación valoramos positivamente las cifras que se han obtenido en verano. Sin embargo, la actividad aún escasa de viajeros internacionales y del segmento de eventos y ferias nos exige prudencia. Creemos necesario que se mantengan los ERTE en las mismas condiciones actuales ya que han demostrado ser una herramienta eficaz a la hora de proteger empleos y empresas", ha trasladado la vicepresidenta ejecutiva de AEHM, Mar de Miguel.

123.467 empleados en ERTE del sector turístico

La ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto afirmó ayer en Congreso que los ERTE han demostrado ser “una herramienta muy eficaz” para mantener el empleo y contener la destrucción de los puestos de trabajo en el sector turístico.

“En lo que va de año los trabajadores en ERTE se han reducido un 30% y a 31 de agosto están contabilizados 123.467 empleados en sector turístico en ERTE”, ha añadido.

A esto se suman los aplazamientos de cuotas a la Seguridad Social y prestaciones extraordinarias por cese de actividad, de las que se han beneficiado cerca de 350.000 autónomos, así como la exoneración de cuotas a los trabajadores del sector de la hostelería.

Por último, recalcó que “el hecho de haber considerado al sector turístico como sector hiperprotegido ha sido muy bueno para mantener los puestos de trabajo”.