El secretario general de la Organización Mundial del Turismo (OMT), Zurab Pololikashvili, ha destacado que las micro y pequeñas empresas y las comunidades son la columna vertebral del sector y necesitan un “fuerte” apoyo para ser “agentes de una transformación centrada en las personas”.
Así lo ha manifestado con motivo de la presentación de las Directrices G20 en esta materia en Bali (Indonesia), con el objetivo de impulsar esos dos agentes a partir de seis líneas clave: capital humano; innovación, digitalización y economía creativa; empoderamiento de las mujeres y los jóvenes; acción climática y conservación de la biodiversidad; circularidad; y política, gobernanza e inversión.
Para el ministro de Turismo y Economía Creativa de Indonesia, Sandiaga Uno, estas líneas de actuación son “esenciales” para situar el bienestar integral de los pueblos en el centro de la recuperación del turismo.
“No queremos que el turismo se limite a recuperarse, necesitamos que atienda mejor a las necesidades de nuestras comunidades, creando buenos empleos, empoderando a los marginados y salvaguardando nuestro planeta, que es lo que pretenden estas Directrices”, ha añadido.
La investigación llevada a cabo por la OMT con los países del G20 pone de relieve la necesidad de abordar los desafíos para las micro y pequeñas empresas de la falta de acceso a la financiación, la falta de acceso a la inteligencia de los mercados, la incertidumbre de los mercados, la inestabilidad de la mano de obra, los cambios en las tendencias y necesidades de los consumidores y los bajos niveles de innovación.
Para las comunidades, los retos más relevantes son la incertidumbre de los mercados y los cambios en las tendencias de los consumidores, la fuga de ingresos, las carencias en materia de educación y competencias, la falta de infraestructuras y gobernanza adecuadas y la excesiva dependencia del turismo.