El alcalde de Sevilla, el popular José Luis Sanz, ha manifestado que ya tiene “decidido acotar” el espacio de la monumental Plaza de España perteneciente al Consistorio, o sea el espacio al aire libre comprendido entre la balaustrada de acceso y los bancos de las provincias; para cobrar entre “tres y cuatro euros” por la visita a los turistas al objeto de costear “vigilancia 24 horas” en el recinto y labores permanentes de conservación.
En una entrevista en la cadena Cope, Sanz ha defendido nuevamente su planteamiento de cerrar el conjunto monumental de esta plaza y cobrar una entrada a los turistas; pero no a quienes acrediten estar empadronados en la ciudad o haber nacido en el conjunto de la provincia.
El Ayuntamiento, titular del espacio de la plaza comprendido entre los bancos de las provincias y la balaustrada, proponía meses atrás al Estado, dueño del edificio y la galería del monumento; un convenio para cerrar por completo este recinto monumental y cobrar así a los turistas.
Los ingresos de taquilla, según la idea del Gobierno local del PP, se repartirían con un 75% para las arcas municipales y un 25% para el Estado, garantizando, según el Ayuntamiento, el libre acceso ciudadano a las dependencias estatales del complejo, que alberga las sedes de la Delegación del Gobierno en Andalucía, de la Subdelegación, de los servicios de Extranjería, de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) o del Cuartel General Fuerza Terrestre del Ejército de Tierra.
Todo ello para cosechar ingresos con los que financiar la conservación del monumento y mantener un servicio de vigilancia las 24 horas del día en el mismo, así como para abrir una escuela o taller de restauración permanente para este emblemático monumento de Sevilla, actualmente de pleno acceso público; si bien el Gobierno central, conformado por el PSOE y Sumar, rechazó de plano la propuesta avisando de que se trata de una “privatización” del espacio público.
Al respecto, José Luis Sanz ha criticado este miércoles una vez más que el Gobierno central, más allá de rechazar la idea, no haya proporcionado ninguna “alternativa” económica para costear una vigilancia de 24 horas en el monumento y trabajos permanentes de restauración, manifestando que, como alcalde, ya tiene “decidido” implantar “un tique” de acceso al espacio de la plaza perteneciente al Ayuntamiento.
“El edificio es otra historia”
“Yo quiero cobrar un tique a quien visite el espacio de la plaza. El edificio es otra historia”, ha dicho Sanz, asegurando que el Ayuntamiento puede “acotar” por sí mismo el espacio de la plaza que le pertenece, extremo que espera realizar cuando cuente con un “proyecto definido”, que según ha dicho ya está siendo redactado.
Y es que, según ha recordado, los accesos a la Plaza de España ya cuentan con “dos cierres laterales” en la avenida de Isabel la Católica, a la cual se abre el monumento, con lo que “sólo quedaría cerrarla por delante”, con una instalación que “ya existe” pero que habría que “completar”.
En paralelo, tras haber manifestado recientemente que en 2025, tras la próxima edición del festival de música Icónica que cada verano viene acogiendo la Plaza de España, abriría “el debate sobre la continuidad o no” del evento en dicho enclave histórico protegido como Bien de Interés Cultural (BIC), Sanz se ha mostrado este miércoles “partidario” de que la ciudadanía local disfrute “de este espacio único”.
“Veo bien que se organicen este tipo de actividades en la Plaza de España”, ha afirmado, destacando que el festival está “bajo la inspección de los técnicos de Urbanismo”.
Además, ha defendido de nuevo que la Plaza de España es un enclave “ideal” para el “gran espacio museístico” que a su entender necesita la ciudad, planteando otra vez si “tiene sentido” que dicho monumento acoja “despachitos de pladur” para oficinas estatales porque desde su punto de vista, “sólo tiene sentido” mantener en el monumento, en materia de dependencias administrativas, la Capitanía General, sede del Cuartel General Fuerza Terrestre del Ejército de Tierra.