La organización sindical francesa de pilotos (SNPL) ha convocado una huelga de pilotos que comenzará el próximo día 3 de mayo y se prolongará hasta el día 30 del mes.
Esta huelga consistirá, según la propia organización, “en paros del trabajo diario de los pilotos” que provocarán importantes retrasos en los vuelos.
Sin embargo, el sindicato ha asegurado que será posible atender a todos los pasajeros, pese a los retrasos que puedan sufrir los vuelos, y que, en caso de haber cancelaciones, serán únicamente por decisión de las aerolíneas.
La causa de esta huelga se encuentra en las reclamaciones que, según el sindicato, llevan haciendo durante dos años al ejecutivo francés, del que sólo han recibido “vagas promesas”.
Algunas de las demandas del colectivo de pilotos al gobierno de François Hollande son la creación de un grupo de trabajo para intentar conseguir la gran cantidad de impuestos del transporte aéreo en Francia y la agilización de los controles de seguridad para la tripulación del avión.
Otro de los puntos principales de la negociación es la revocación de la ley Didard, que garantizaría el servicio aéreo en caso de huelga, haciendo que los empleados informen con antelación si acudirán a la huelga.