La cadena hotelera Meliá Hotels International ha ratificado en agosto la evolución positiva de sus hoteles en la zona de Magaluf (isla de Mallorca), tanto en cantidad de visitas como en la calidad de las mismas, tras registrar en agosto un incremento del 16% en los ingresos medios por habitación disponible (RevPar) y cumplir este mes las estimaciones anunciadas por los hoteleros hace un mes.
En este sentido, Meliá ha informado, mediante comunicado, que las medidas de normalización y el esfuerzo comercial y de renovación de la planta hotelera han conseguido invertir la tendencia del destino, al que Meliá califica “de alto potencial”.
A comienzos del mes de agosto, la Asociación Hotelera de Palmanova-Magaluf adelantaba un balance provisional para la presente temporada, el cual mostraba “importantes avances” en la segmentación de la clientela de este tradicional destino vacacional, con una vuelta al perfil familiar y de mayor poder adquisitivo, en detrimento de la clientela más joven y, en especial, del segmento denominado de “turismo hooligan”.
Meliá Hotels International, con más de 3.500 habitaciones en la zona y que durante los últimos cuatro años ha protagonizado “una apuesta importante por la mejora y reposicionamiento de Magaluf” mediante su proyecto Calviá Beach –en cuyo marco se han renovado ya nueve hoteles con una inversión de 130 millones de euros– presenta ahora su balance adelantado de la temporada hasta agosto, “ratificando la positiva evolución, tanto cuantitativa como cualitativa, de este destino turístico”, según informa la cadena hotelera.
En este sentido, todos los hoteles del grupo en la zona son ya de 4 estrellas (como los Sol Antillas, Sol Barbados, Sol House Guadalupe, Sol Katmandú Park & Resort, Sol House Trinidad, Sol Palmanova Mirlos Tordos, Sol Wave House y Sol Beach House Cala Blanca) o lujo (como el hotel ME Mallorca), y desde 2011 han incrementado sus ingresos un 64%, con un crecimiento de la tarifa media por habitación de un 45%, y del 48% en el ingreso medio por habitación disponible (RevPAR).
Todos los hoteles de Meliá en Magaluf son de 4 estrellas
Meliá recuerda que a este incremento en la rentabilidad de los hoteles cabe añadir el impacto social y económico generado en la comunidad, ya que entre otros parámetros, la plantilla media se ha incrementado en casi un 40% con nuevas contrataciones, si se considera el conjunto del periodo, los pagos a la Seguridad Social en los hoteles de la zona se incrementaron un 47%, y los pagos a proveedores de suministros (en su mayoría empresas locales) se duplicaron.
Concretamente en agosto de 2015, el RevPAR –el principal indicador para medir la rentabilidad hotelera– creció un 17% en los hoteles de la cadena respecto a agosto del año anterior, los ingresos se incrementaron un 14% y la tarifa media fue un 6% superior. Además, la ocupación media registrada fue de 88%, con dos hoteles con lleno absoluto.
Según la cadena hotelera, esta zona en plena renovación se ha convertido además, por su alto potencial, en campo de excelencia para el lanzamiento de los nuevos conceptos derivados de la tradicional marca de hoteles Sol Hotels & Resorts: Sol Hotels, Sol House, Sol Beach House y Sol Katmandú Park & Resort, que ya se han extendido a otros destinos vacacionales y presentan un futuro de éxito como enseñas de referencia internacional.
Cambio de modelo
La transformación de un destino como Magaluf trasciende, para los gestores de Meliá, la renovación arquitectónica y del producto, e implica un auténtico cambio en el modelo turístico de Magaluf. Así, las cifras muestran cómo el segmento de jóvenes –que llegaban en parte atraídos por el modelo de excesos y borrachera promocionado por una parte de la oferta durante los últimos años– se ha ido reduciendo en beneficio del segmento de turismo familiar, tradicionalmente dominante en Magaluf.
Igualmente, los mercados de origen han comenzado a diversificarse con una presencia creciente de turistas suecos, alemanes e italianos, fundamentalmente, reduciendo así la dependencia del mercado británico.
La oferta complementaria tiene un papel muy relevante en este cambio de modelo, pues como explica Mark Hoddinott, Director General de Real Estate en Meliá “el cliente de mayor poder adquisitivo que interesa a Magaluf, necesita disponer de una oferta complementaria de calidad en el propio destino acorde al nivel de los hoteles, porque si no se irán a otros lugares turísticos o no repetirán su experiencia”.
En este sentido, el ejecutivo de la cadena ha destacado el papel de la colaboración público-privada, así como el reconocimiento del equipo de gobierno municipal de Calviá por el esfuerzo realizado, y su apoyo explícito hacia las importantes actuaciones que aún quedan por realizar hasta 2017, cuando el Grupo espera contar con 11 hoteles reformados y una inversión conjunta con sus socios superior a los 190 millones.
La seguridad y reputación de Magaluf, prioritarios
Según Meliá, uno de los mayores logros en el proceso de reconversión del modelo turístico en Magaluf ha sido, sin duda, invertir la deriva que lo llevaba a especializarse en el segmento de turista joven de bajo coste y aficionado a los excesos de alcohol y sus consecuencias.
Para el vicepresidente y Consejero Delegado de Meliá Hotels International, Gabriel Escarrer, “el verano de 2015 ha sido el punto de inflexión para Magaluf, cuando el destino ha comenzado a superar el modelo obsoleto y a implantar un modelo rentable y sostenible para el futuro, gracias al contagio de nuestra apuesta entre otros empresarios, y a la fundamental colaboración del sector público. Podemos decir que lo más difícil ya está hecho”, ha afirmado el máximo ejecutivo de Meliá.
Para la nueva temporada, Meliá Hotels International afronta dos “hitos esenciales” que pondrán un “broche de oro” al proyecto Calviá Beach: la renovación en 2016 y rebranding a la marca Meliá Hotels & Resorts del actual hotel Sol Antillas (350 habitaciones), que es un hotel emblemático que corona la bahía de Magaluf por el oeste; y la renovación integral del hotel Sol Jamaica, un hotel fundamental para revitalizar la Avenida de Magaluf, en la segunda línea de mar, que se podría inaugurar en el verano de 2017.