España acogió en 2016 un total de 25.112 reuniones (+16%) en las que participaron un total de 3.856.630 personas (+4,5%). Esta actividad generó un impacto económico en el país de 5.929 millones de euros, lo que representa un incremento del 15% con respecto a 2015, según datos del informe del Spain Convention Bureau.
Del total de eventos celebrados, las jornadas siguen siendo las más numerosas, representando el 53% de los actos, seguidos de las convenciones (30%) y los congresos (17%). Todas las tipologías han crecido respecto al año anterior, concretamente un 4,5% las jornadas, un 27,7% las convenciones y los congresos un 42,3%.
Los participantes se han incrementado un 17,2% en congresos y un 7,7% las convenciones, pero han disminuido un 6,1% en las jornadas.
En cuanto al ámbito territorial de las reuniones, el 52% han sido nacionales, el 25% regionales y 23% internacionales. Respecto al año anterior, se han incrementado las tres tipologías de eventos, en mayor medida las de ámbito nacional (22,7%) e internacional (19,3%).
En cuanto a los delegados, el 75% han sido nacionales y el 25% internacionales. Cataluña y Madrid son las comunidades autónomas que más participantes han aportado.
El médico-sanitario, el sector más activo
Por sectores de actividad, el médico-sanitario ha seguido siendo el más activo, con el 19,9% de las reuniones, seguido del económico-comercial (17,5%), la universidad (9,5%) y el público (8%).
La estacionalidad del turismo de reuniones en España sigue la misma tendencia que años anteriores. Los meses con una mayor tasa de celebración de eventos son abril, mayo, junio, octubre y noviembre.
Las salas de hoteles han incrementado su peso, convirtiéndose en 2016 en la principal sede de celebración de reuniones, por encima de los Palacios de Congresos.
Más de la mitad de las reuniones celebradas en el año 2016 albergaron entre 59 y 150 participantes. Los eventos de entre 50 y 250 delegados han aumentado, mientras que los de menor tamaño han descendido ligeramente.
La duración media de las reuniones es de 2,40 días, un ligero incremento con respecto a 2015 principalmente por el aumento de los eventos de más de cuatro días.
En 2016 se incrementó en un 2,5% la proporción de participantes que se alojó en hoteles (98,2%), siendo el alojamiento elegido por la mayoría. Concretamente, los hoteles de cuatro estrellas son los más utilizados.
En cuanto al desembolso que realizan los delegados, el coste de la inscripción a los eventos fue de 358,12 euros, un 14,8% más. El coste del viaje alcanzó los 394,04 euros, un 3,8% más y el coste del alojamiento fue 116,73 euros al día, un 18,1% más. En cuanto al gasto medio personal diario de los participantes fue de 103,58 euros.