Los sindicatos USO y Sitcpla (España), SNVPAC (Portugal), UIL (Italia) y CNE (Bélgica) han convocado una huelga de tripulantes de cabina y pasajeros de Ryanair para los próximos 25 y 26 de julio, después de la reunión que han mantenido este jueves en Bruselas.
USO Sector Aéreo calcula que el seguimiento de la huelga será masivo ante las “penosas condiciones laborales que actualmente soportan: un 75% de la plantilla está contratada a través de empresas de trabajo temporal, sujeta a la legislación irlandesa, sin salario base y cobrando únicamente por las horas de vuelo”, según ha explicado el sindicato en un comunicado.
El sindicato asegura que ha intentado negociar con Ryanair desde diciembre de 2017, cuando la aerolínea anunció su intención de reconocer los sindicatos, pero la compañía “ha intentado imponer unilateralmente el sometimiento a la legislación laboral irlandesa y la renuncia forzada de los trabajadores de acudir a los tribunales españoles en favor de los irlandeses”.
Por eso, más de 1.800 tripulantes de cabina y pasajeros españoles están llamados a la huelga –más de 4.000 sumando los de Italia, Portugal y Bélgica–, si en los próximos días los sindicatos españoles USO y Sitcpla y la compañía, que acudirán a una conciliación en el Servicio Interconfederal de Mediación y Arbitraje (SIMA), no consiguen evitar los paros y resolver el conflicto.
Actualmente, la aerolínea, que el último año obtuvo unos beneficios de 1.4.50 millones de euros en España, opera unos 2.000 vuelos diarios y en los aeropuertos españoles cuenta con 13 bases.
Ryanair "se niega a negociar"
El responsable de Vuelo de USO Sector Aéreo, Ernesto Iglesias, ha vaticinado “retrasos y cancelaciones de decenas de vuelos en los cuatro países” en caso de que la empresa no se presente a la conciliación o no haya acuerdo y sea necesario acudir a la huelga porque, aunque habrá servicios mínimos, habrá un mayor número de vuelos afectados.
“USO Sector Aéreo quiere, una vez más, reiterar que en ningún caso su intención es perjudicar a los usuarios de la aerolínea, pero Ryanair, a pesar de los abultados beneficios que genera a cada año, se niega rotundamente a negociar con los sindicatos”, concluye el comunicado.