El Gobierno neerlandés ha informado que los turistas deben mostrar a la llegada al archipiélago una prueba PCR negativa.
El Gobierno neerlandés ha quitado la restricción y recomendación de no viajar a las Islas Canarias a partir de este martes, después de que lo hayan hecho otros países como Alemania, Gran Bretaña y parte de los países escandinavos ante la disminución de positivos de coronavirus en las islas durante las últimas semanas.
El ministerio de Asuntos Exteriores ha decidido cambiar de código naranja –sólo viajes necesarios– a código amarillo tanto a las Canarias como a Grecia, por lo que los viajeros que regresen a Holanda desde alguno de estos destinos ya no tendrán que guardar una cuarentena obligatoria.
Asimismo, el Gobierno neerlandés ha informado a los ciudadanos de su país a través de su página web oficial que deben mostrar a la llegada al archipiélago una prueba PCR negativa realizada entre 48 y 72 horas antes de viajar, una medida en la que está trabajando actualmente el Ejecutivo regional para su aplicación.
Mientras, la Península y Baleares mantendrán el color naranja, lo que supone que una vez que el viajero regrese a su país deberá guardar una cuarentena domiciliaria durante diez días.
Piden responsabilidad a la población
El presidente de la Comisión de Turismo y Seguridad de la Federación de Hostelería y Turismo de Las Palmas (FEHT), Tom Smulders, ha celebrado la noticia aunque, advierte, “viene aparejada de la necesidad de guardar debida cautela y especial cuidado para mantener el baremo del ratio de contagio en los actuales niveles”.
Smulders considera “vital” para el sector mantener a la isla en los actuales márgenes, para así “mantener abiertas las conexiones con los principales países emisores de clientes”, que consideran las Canarias en estos momentos como “destino seguro”.
En este sentido, Smulders ha hecho una llamada a la responsabilidad de la población, para que “mantenga una actitud colaboradora, cumpliendo con las medias sanitarias establecidas”, lo que evitará que el Gobierno “deba aplicar restricciones más duras”, como las impuestas en estos momentos en el resto del país.
Asimismo, considera oportuna la realización de test en origen, a todos los viajeros, antes de emprender el vuelo a las islas y en su caso, hacerlos en destino, en los aeropuertos, antes de que los viajeros se desplacen, tras su llegada, a sus lugares de residencia o descanso.
“Solo a través de estos controles y una actitud responsable de la población, Canarias podrá permanecer como destino confiable y vislumbrar la recuperación del sector y con ello la de la economía de nuestra región”, concluye Smulders.
