Apenas el 34% de los españoles que sufren incidencias graves durante sus viajes, como cancelación, grandes retrasos o pérdida de maletas, llegan a presentar una reclamación oficial ante las autoridades competentes (4%) o ante la compañía responsable (30%), según los datos del último Eurobarómetro publicado por la Comisión Europea para recordar los derechos que asisten a los pasajeros en la UE.
Así, a pesar de que el 91% de los españoles encuestados afirman que en caso de incidencia seria piensan en “reclamar a alguien” y un 75% que presentarían una queja ante la compañía, cuando un imprevisto de este tipo sucede sólo el 34% lleva a cabo la queja formal y el 66% no hace nada.
Estos datos sitúan a los viajeros españoles en torno a la media europea, ya que el 69% de los europeos responden también que no han presentado reclamaciones tras sufrir cancelaciones o incidencias similares en sus viajes, a pesar de que el 85% afirma que cuando se ve en una situación así sí piensa en reclamar.
En la media de la UE, el 28% de los pasajeros afectados presenta una reclamación ante la compañía de transporte (ya sea aérea, de ferrocarril o por carretera) y sólo un 4%, al igual que en el caso de los españoles, acude a autoridades nacionales competentes en protección del consumidor.
El Eurobarómetro también revela que son muy pocos los españoles (7%) y europeos (8%) que solicitan asistencia para sí mismos u otra persona con discapacidad o problemas de movilidad, aunque es un derecho recogido por las normas en la UE.
Además, según los mismos datos, sólo un 27% de los españoles y un 33% de los europeos siente que está bien informado en cuanto a sus derechos como pasajeros de ferrocarril, una cifra que se sitúa en el 28% de los españoles y 30% de europeos en el caso del transporte aéreo. Apenas un 24% de los españoles (27% en la UE), además, cree estar bien informado en cuanto los derechos en el transporte en autocar y un 13% (16% en la UE) respecto a servicios de ferry y marítimos.
En este contexto, el Ejecutivo comunitario ha publicado una revisión de las directrices sobre aplicación de las reglas de protección del pasajero coincidiendo con el periodo vacacional, con el objetivo de facilitar su cumplimiento y armonizar su aplicación por parte de organismos nacionales.