Destinos

El turismo enogastronómico avanza en España poniendo el foco en la mejora de su producto

El segmento mantiene el pulso para encontrar experiencias únicas, suponiendo una relevante fuente de ingresos para el sector

11/10/2024

8:57 horas

Manuel Campillo

El turismo enogastronómico sigue ganando peso en nuestro país, siendo una de las principales motivaciones para el visitante internacional.

El turismo enogastronómico sigue ganando peso en nuestro país, siendo una de las principales motivaciones para el visitante internacional.

El sector turístico avanza buscando conseguir mejorar el impacto que tiene como actividad económica, y para ello busca pilares sobre los que continuar mejorando el producto que se ofrece al visitante. Uno de estos es la enogastronomía. Seña de identidad de cada región, permite al visitante descubrir y conocer de primera mano los productos de la zona, al tiempo que le ofrece un valor añadido al turista.

Según Turespaña, el turismo gastronómico es ya “uno de los posibles motivos principales de viaje”, siendo “un atractivo complementario a otras motivaciones” de viaje, unido, además, a las “actividades relacionadas” con ello, como visitas a bodegas o viñas, entre otras. Por ello, según el instituto turístico, “hasta 10,6 millones de turistas internacionales” que han visitado España en el primer semestre han realizado actividades gastronómicas o relacionadas con el vino, es decir, uno de cada cuatro viajeros que llegaron a nuestro país, desembolsándose en ellas 15.157 millones de euros y representando el 27,27% del total del gasto.

Con todo, Turespaña considera que “la gastronomía y la enología son un pilar fundamental de la marca España, con un impacto importante en nuestra reputación internacional”. Es por ello por lo que apostar por los productos enogastronómicos y su puesta en valor se ha convertido en clave para los destinos de nuestro país.

Así, en Cataluña están trabajando para seguir mejorando su oferta en este ámbito. De hecho, ofrecen una gran variedad de “alimentos, productos y elaboraciones únicas, que son la base de un recetario vasto y profundo”, presumen desde la Agencia Catalana de Turismo. Para poner en valor los productos, los diversos sistemas de protección, como las Denominaciones de origen protegidas (DOP) o las Indicaciones geográficas protegidas (IGP) son de gran ayuda.

De hecho, Cataluña presume de ir “más allá del pan con tomate y el alioli” con “un universo de productos y elaboraciones que sustentan el carácter de la cocina catalana, muchos de ellos con distintivos de origen y calidad”, como las DOP del arroz del Delta del Ebro, las avellanas de Reus o el queso del Alt Urgell y la Cerdanya. Además, en el apartado de las IGP presumen de contar con los calçots de Valls, el gallo del Penedés o la longaniza de Vic.

En la Comunidad de Madrid, por ejemplo, disponen también de “siete distintivos de calidad para alimentos destacados”, explica Laura Martínez Cerro, directora general de Turismo de la Comunidad de Madrid, y pone de ejemplo la reciente DOP aceite de Madrid, junto a la IPG carne de la Sierra de Guadarrama, la DOP vinos de Madrid y la marca Garantía Huerta de Villa del Prado, y la Denominación de Calidad aceitunas de Campo Real. “Todas ellas avalan la excelencia de los productos y garantizan su trazabilidad”, detalla Laura Martínez Cerro, directora general de Turismo de la región.

En Andalucía presumen de disponer de una gran variedad de DOP e IGP. Así, existen 25 referencias enológicas, junto al brandy de Jerez como bebida espirituosa con IGP, y tres DOP en vinagres.

En el caso de la provincia de Castellón, cuentan con la IGP para viñedos y vinos IGP Castelló, comprendida por “16 bodegas situadas en las zonas vitivinícolas de Alto Palencia-Alto Mijares, Sant Mateu y Les Useres-Vilafamés”, detallan desde el Patronato Provincial de Turismo. Además, disponen de “otras bodegas” que, junto a las primeras, “forman parte de la marca de calidad ‘Castelló Ruta de Sabor’ para poner en valor nuestros vinos”.

La ciudad de Madrid, además, recuerda que se ha convertido en la única capital europea “que cuenta con una DOP propia: Vinos de Madrid”, que ofrece unas referencias “excelentes presentes en muchas de las cartas de vinos de los restaurantes madrileños”, explica Almudena Maíllo, concejala delegada de Turismo del Ayuntamiento de Madrid.

En el caso del Ayuntamiento de Valencia, recuerdan que en su provincia existen dos grandes DOP, como son la de “Valencia y Utiel-Requena”. Además, añaden que “se pueden encontrar monovarietales que sorprenden o cupajes mágicos, vinos jóvenes y tintos de guarda. Hay de todo”, detalla Tono Franco, director de la Fundación Visit Valencia, que recuerda que la mayoría de sus referencias se pueden disfrutar “en los restaurantes de la ciudad”.

A su igual, en Gijón recuerdan que su producto por excelencia es la sidra de Asturias, que dispone de DOP, y en el rural, indican también la relevancia de la faba de Asturias, también con DOP. Igualmente, reseñan las referencias del mar del “bonito del norte, bocartes, xarda, oricios, pulpo, parrochas, sardinas y lubina”, entre otras, detallan en Visita Gijón.

Además, en Gran Canaria también presumen de sus productos de calidad, como “la sal marina, los quesos, la rica variedad de frutas tropicales, el gofio de millo, los pescados o el café de Agaete”, presume Carlos Álamo, consejero de Turismo de Gran Canaria. Todo ello sin mencionar sus vinos, “reconocidos y premiados por todo el mundo”, detalla.

La hostelería de calidad

Una de las claves que los destinos están intentando potenciar es la calidad de la hostelería. Por ello, por ejemplo, la Comunidad de Madrid dispone de una “estrategia específica para el apoyo a la hostelería que incluye una veintena de líneas de trabajo”, como señala Martínez Cerro. Entre las propuestas, destacan la creación de un “convenio de colaboración” para mejorar “la calidad y la competitividad” del sector hostelero “a través de la sostenibilidad, la digitalización y la promoción”.

En el caso catalán, se están centrando en hacer una “segmentación de la oferta” para mejorar su atractivo. Por ello, los Hoteles Gastronómicos de Cataluña buscan “poner en valor los alojamientos que están claramente posicionados para atraer turismo gastronómico”, explican desde la Agencia Catalana de Turismo. Además, disponen de un programa de formación durante todo el año con sesiones relacionadas con el segmento.

Castellón, por su parte, apuesta por el club de producto ‘Castelló Ruta de Sabor’, que, “además de una marca promocional, es, sobre todo, un distintivo de calidad. De esta manera, sus miembros han de cumplir una serie de criterios para pertenecer al mismo”, al tiempo que se orgnizan “formaciones para sus miembros con el fin de dar un servicio más profesional en todos los sentidos”.

En Madrid, Maíllo recuerda que trabajan “para impulsar la excelencia gastronómica” con el “apoyo, colaboración e interlocución constante” con los principales actores del sector. Así, ofrecen alianzas para “promover el turismo gastronómico”, como la firmada con la Academia Madrileña de la Gastronomía. Además, apoyan “grandes citas vinculadas con la gastronomía, como el Congreso Internacional de Gastronomía Madrid Fusión” o el Salón Gourmets, entre otros. “Nuestro objetivo es destacar este elemento como una de las mejores vías para descubrir y experimentar la ciudad”, expone.

En el caso de la ciudad de Valencia, recalcan que del impulso que están dando a este segmento están alcanzando logros de los “proyectos enogastronómicos impulsados por la ciudad”, como la celebración de los premios We’re Smart Green Guide 2024, explica Franco, al tiempo que recuerda que durante la última entrega de los Top 100 Sumilleres de España, varios profesionales de la ciudad han sido reconocidos.

Para impulsar la hostelería, Visita Gijón cuenta con un apartado para profesionales con “información y asesoramiento para empresas y servicios del sector turístico”, así como con diversos “programas de competitividad dirigidos a empresas”, junto a una variada oferta formativa “gratuita para profesionales” que abordan temas de “gestión, innovación, marketing, escanciado o técnicas de cocina”, entre otros, explican desde la ciudad.

En el caso de Gran Canaria, su apuesta convierte al producto enogastronómico en uno “en los que más hemos trabajado en los últimos años”, detalla Álamo. Por ello han hecho una apuesta muy fuerte con los productores para satisfacer “las demandas de nuestros clientes”. “La enogastronomía nos está dando muy buenos resultados y nos ha permitido elevar la facturación del sector”, detalla.

Creando actividades

Otra de las maneras en las que los destinos siguen promocionando su oferta enogastronómica es con eventos especiales que, además, sirven también de reclamo para el visitante. En la Comunidad de Madrid, Martínez Cerro detalla que esta oferta “es cada vez más variada y consolidada”, con presencia en las grandes ferias del sector “como el Salón Gourmets o Madrid Fusión”, junto a la promoción del “contacto directo entre productores y consumidores a través de la puesta en marcha de mercados de proximidad”, explica.

En el caso catalán, su oferta se ha reunido en torno a un “catálogo de experiencias enogastronómicas”, donde, además de los eventos como ferias y mercados, también se invita a conocer alguna de 180 fiestas que se celebran al año o alguno de los 170 restaurantes con “marca Cuina Catalana” que avala restaurantes con “platos tradicionales” de la región, así como “25 colectivos de cocina, más de 50 restaurantes de slow food y 54 restaurantes con estrellas Michelin”.

En Andalucía presumen de contar con más de una veintena de eventos enogastronómicos, entre los que destacan la fiesta del Mosto en Atajate, la noche del vino de Competa o la feria del caballo de Jerez, entre otros. Además, la región cuenta con más de 70 bodegas visitables, sin contar otros recursos enoturísticos, como los viñedos o las toneleras, así como museos, centros de interpretación o lugares históricos relacionados con la viticultura, como los lagares o los pagos.

En el caso de Catellón, disponen de dos ferias dentro del marco ‘Castelló Ruta de Sabor’, como son la Feria de Navidad y la Feria de Primavera, con presencia de todos los socios de la marca y donde se realizan “showcookings y otras actividades”. Además, este año se ha celebrado la III Edición del Festival Gastronómico ‘Castelló Ruta de Sabor’, “con presencia de numerosos chefs galardonados que han utilizado nuestros productos y vinos”, explican.

La ciudad de Madrid es un “destino de referencia para el disfrute de la mejor gastronomía”, detalla Maíllo. Con “sus mercados, sus tiendas delicatessen o los Gourmet Experiences de El Corte Inglés”, la ciudad abarca un sinfín de posibilidades para los amantes de los sabores más especiales. Además, “forma parte de la agenda cultural y de ocio” de la ciudad, con citas como Madrid Fusión, Salón Gourmets, Tapapiés, el Hotel Tapa Tour, la Madrid Cocktail Week o el Día de Mercado de la Cámara Agraria y el Mercado Municipal de Productores Planetario, resume la concejala delegada de Turismo.

En la capital del Turia cuentan con “numerosas actividades” relacionadas con el segmento, como la Mostra Proava, “que se celebra cada año” y que crece edición tras edición, presume el director de la Fundación Visit Valencia.

Gijón pone en valor la Fiesta de la sidra natural, el Primer Sidre l’Añu, el encuentro Gijón de sidra y la iniciativa de los jueves de sidra. Todo ello, sin contar con el Mercado Artesano y Ecológico que se celebra el segundo fin de semana de cada mes y cuando coincide con los puentes festivos.

Gran Canaria participa en “eventos y ferias que ponen en valor el producto vitivinícola a nivel regional y nacional”, como la Feria Gran Canaria Me Gusta o los “congresos, ferias y eventos” a los que acude la institución, en donde portan “el producto gastronómico como uno de los pilares de la promoción”.

Potenciar el producto

Los destinos están trabajando para seguir potenciando este producto, como recoge Turespaña en su Plan Estreatégico de Marketing, que finaliza en 2024, donde se incluye la “promoción de la enogastronomía en todos sus productos, pero especialmente para los de turismo urbano, turismo de parada en vacaciones largas multi-país, turismo familiar de inmersión, turismo patrimonial y turismo de naturaleza”.

Con ello, detallan desde el instituto, trabajan con “diversos interlocutores” para participar “en sus acciones de promoción exterior”, como en el caso del Día Mundial de la Tapa, o el apoyo “a eventos especiales con destinos, como ‘The World Paella day’ en colaboración con la ciudad de Valencia”.

A todo ello, además, Turespaña tiene en cuenta la enogastronomía en “todas nuestras acciones de comunicación, en nuestras campañas de publicidad, en nuestras redes sociales y en nuestra página web”, explican, y señalan que está cobrando cada vez “más importancia la colaboración con creadores de contenido y prescriptores, tanto foodies como de estilo de vida y viajes” para promocionar la enogastronomía española.

En los destinos también trabajan para poner en valor los productos. Así, la Comunidad de Madrid, con las asociaciones del sector, “da a conocer la oferta regional a través de ferias, redes sociales o medios de comunicación”, junto a “campañas de promoción específicas y generación de materiales audiovisuales”, detalla Martínez Cerro.

La Agencia Catalana de Turismo trabaja con un “programa de turismo enogastronómico para poner en valor” estos productos y “promover los viajes donde la motivación principal es probar y conocer la gastronomía y/o el producto vitivinícola”, explican. Para fomentarlo, “los agentes participan en acciones de promoción y de apoyo a la comercialización”. Con ello, la agencia contribuye “a potenciar y promocionar la cultura gastronómica”, así como su “patrimonio vinícola”, detallan.

Andalucía apuesta por desarrollar “una línea de diversificación de producto para optimizar el proceso de promoción”. En este sentido, apuestan por “ordenar y catalogar la oferta gastronómica existente”, desarrollando y promocionando “el producto hacia la oferta y demanda profesional”, elaborando “material audiovisual” e identificando a los “agentes y agencias especializadas” en el segmento.

La provincia de Castellón quiere seguir trabajando poniendo en valor los productos “asociados a la marca, entre ellos el vino, fomentando las sinergias” junto a “otras experiencias que combinan el conocimiento de los vinos con otras actividades”, detallan desde el Patronato.

El Ayuntamiento de Madrid ya considera segmento como “el segundo producto turístico con mayor demanda (16%)”, por lo que están “destinando los esfuerzos” a mantener el segmento al alza con acciones como el convenio al que han llegado con Madrid Enoturismo para poner en marcha “una serie de actividades turísticas y proyectos vinculados a la cultura del vino”.

Valencia trabajan para que el sector, “siga desarrollándose”, detalla Franco, por lo que buscan establecer criterios y líneas de actuación que impulsen la gastronomía y otras actividades vinculadas al turismo gastronómico”, añade.

En Gijón están integrándose en la iniciativa ‘Sidraturismo Asturias’ para “ofrecer experiencias para conocer la cultura sidrera”, al tiempo que el Consistorio ha declarado la sidra “como bebida oficial en sus eventos” y “se promociona como valor turístico”.

Álamo reseña que en Gran Canaria se está realizando una gran “inversión” por parte del sector privado para que los productos de la región alcancen “un mayor reconocimiento nacional e internacional”, además, de la promoción del segmento que realiza el Cabildo.

Ayudas para mejorar los productos

Uno de los objetivos de los entes públicos es fomentar las líneas de ayudas para mejorar los productos enogastronómicos. En este sentido, el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia ha destinado 3.400 millones de euros para avanzar “hacia un modelo más sostenible, más rentable y de mayor calidad”, apuntan desde Turespaña.

El programa dispone de diversas líneas de subvenciones destinadas al segmento, englobado dentro del Plan Turístico Nacional de Enogastronomía, “con un presupuesto de 68,6 millones de euros, que incluye Planes de sostenibilidad turística en destinos enogastronómicos; un Programa Experiencias Turismo España; acciones especiales y un Programa de promoción internacional”.

Gracias a las ayudas, los destinos intentan hacer mejoras dentro de su oferta. La Comunidad de Madrid va a buscar “seguir promocionando la oferta de gran calidad como parte del estilo de vida del que nuestros turistas quieren disfrutar cuando nos visitan”, detalla Laura Marínez Cerro, directora general de Turismo de la región.

La Agencia Catalana de Turismo dispone de la Estrategia de turismo enogastronómico de Cataluña 2022-2027, con el que destinan “casi siete millones de euros” para “impulsar 26 proyectos” vinculados al sector, y recuerdan que Cataluña será Región Mundial de la Gastronomía en 2025.

En Andalucía, la apuesta para 2024 y 2025 pasa por la “identificación, actualización y catalogación de los recursos gastronómicos” para desarrollar un “plan estratégico de gastronomía” que sirva para “posicionar los recursos” y sirva, al mismo tiempo, para que los destinos amplien “su oferta turística”. El Patronato Provincial de Turismo de Castellón, por su parte, han apostado por renovar “la página web de ‘Castelló Ruta del Sabor’ de manera que permite a sus miembros una mayor agilidad para actualizar sus ofertas y contenidos”. Además, permite alojar “la oferta enogastronómica de la provincia”, convirtiéndose en una auténtica “guía turística para el visitante”.

Madrid, en su caso, destaca que quiere orientar la oferta a “la innovación, la originalidad, la diversificación y el turismo de calidad”, algo que ya están logrando. Almudena Maíllo, concejala delegada de Turismo, destaca que van a “seguir analizando el segmento y desarrollando nuevas iniciativas” para avanzar.

La ciudad de Valencia busca “nuevas actividades atractivas para los visitantes” al tiempo que mejoran “su oferta”, explica Tono Franco, director de la Fundación Visit Valencia. Es por ello por lo que adelantan que van a contar con una nueva experiencia en el Parque Natural de las Hoces del Cabriel con actividades enoturísticas.

En el caso de Gijón, los trabajos se centran en “la definición de la Ruta de la Sidra” junto al trabajo con los llagares para que “avancen en sus propuestas turísticas” y “sinergias entre todos los actores”.

Finalmente, en Gran Canaria están desarrollando el Plan Vitícola de Gran Canaria 2023-2024, enfocado en “trabajar en la vid de la isla, con acciones destinadas al campo”, junto al “Proyecto InerAcciones, con los fondos Leader, para consolidar la Ruta del Vino de Gran Canaria en toda la cadena de valor”, expolica Carlos Álamo, consejero de Turismo de Gran Canaria.

Un producto destacado para agencias y turoperadores

Los productos relacionados con la enogastronomía cada vez resultan más interesantes para las agencias de viajes. Por ello, las mayoristas apuestan por el segmento. En Ávoris Corporación Empresarial disponen de numeroso producto en Marsol, que permite a sus clientes “explorar diversas regiones vinícolas de España a través de experiencias únicas y enriquecedoras”, explica Patxi Izquierdo, director de Marsol Esquí & Experiencias. “Las visitas a bodegas” o “catas de vinos o comídas típicas de la región” son algunas de las propuestas de Marsol.

En Civitatis, por su parte, presumen de contar con “una amplia gama de experiencias enogastronómicas en todo el país”, entre las que destacan las “visitas guiadas a bodegas que incluyen cata de vinos”, así como “tours gastronómicos en ciudades emblemáticas, como Vigo o Madrid; talleres de cocina tradicional o clase de cocina vasca en San Sebastián”, entre otras.

CNTravel confirma que disponen de “cada vez más paquetes cerrados” con “almuerzos o cenas en restaurantes típicos”, junto a actividades como “visitas a fábricas, bodegas o almazaras”.

En los últimos años, las compañías confirman haber notado un “notable incremento de la demanda”, en palabras de Izquierdo. “Este tipo de turismo ha pasado de ser un nicho a convertirse en una tendencia en auge”, confirman desde Civitatis, al tiempo que en CNTravel añaden que “ahora los turistas buscan mucho más que una estancia, quieren una experiencia”.

Por ello, tratan de “ampliar la oferta de productos enogastronómicos para satisfacer las demandas de los turistas”, confirman desde Civitatis, mientras que en Ávoris mantienen que cuentan con un “compromios con la expansión y diversificación de la oferta enogastronómica”. Al igual que en CNTravel, donde el segmento ha adquirido tal protagonismo “que no tendría sentido no apostar por él”.

@ NOTICIAS RELACIONADAS
# TAGS

Queremos tu opinión

Quiero recibir avisos de comentarios de esta noticia
Utilizamos cookies propias y de terceros para mejorar nuestros servicios y obtener datos estadísticos de la navegación de nuestros usuarios. Si aceptas o continúas navegando, consideramos que aceptas su uso. Puedes cambiar la configuración u obtener más información aquí   Aceptar