La reunión de ministros de Turismo del G7, la primera en la historia dedicada íntegramente al sector turístico, se está celebrando la semana pasada en Florencia, entre el 13 y el 15 de noviembre, con el objetivo es renovar la conciencia del turismo como “motor de crecimiento y desarrollo social”.
La reunión, presidida por la ministra italiana Daniela Santanché y cuenta con los ministros y jefes de Delegación de Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Japón, Italia, Reino Unido y la Unión Europea, según un comunicado.
España, pese a ser una potencia en este ámbito y el segundo destino más visitado del mundo, no estuvo presente en el encuentro.
Todos ellos se reunieron en una mesa redonda para orientar el futuro de la industria turística y hacer que el sector sea cada vez “más sostenible” desde el punto de vista económico, social y medioambiental, en un contexto de rápida evolución de las tecnologías.
Así, el orden del día, dividido en varias sesiones, se enriquece con la participación de organizaciones internacionales como la OCDE y ONU Turismo, países invitados a una sesión ampliada y representantes del sector privado.
En concreto, las prioridades de trabajo definidas por la presidencia italiana son: Turismo y oportunidades de desarrollo socioeconómico; capital humano: trabajo, inclusión y competencias; y digitalización e inteligencia artificial.
“La reunión brindará la oportunidad de explorar estos temas en profundidad, compartiendo buenas prácticas ya adoptadas y reflexionando sobre nuevas oportunidades de crecimiento para todo el ecosistema turístico”, ha destacado la nota de prensa.