La red de aeropuertos de Aena aplicará a partir de enero del próximo año bonificaciones sobre las tasas aeroportuarias a las aerolíneas que contribuyan al crecimiento del tráfico aéreo total y a aquellas que abran nuevas rutas, incentivos con los que prevé un aumento del 2% del tráfico aéreo en 2014, hasta 4 millones de pasajeros.
Este nuevo sistema de incentivos, que se extenderá a 2015 con el objetivo de consolidar dicho crecimiento, busca favorecer el incremento de pasajeros, la implantación de nuevas rutas y apoyar a las compañías que quieran aumentar su actividad, según ha destacado la ministra de Fomento, Ana Pastor, en un encuentro con los medios para explicar las nuevas bonificaciones.
La medida, que se incluirá como una enmienda a los Presupuestos Generales del Estado (PGE), permitirá aplicar una bonificación del 100% a las tasas de pasajeros en las nuevas rutas que abra cualquier compañía, tanto nacionales como internacionales. El 75% se devolverá a las aerolíneas en 2014 y el 25% restante en 2015 si la compañía mantiene el número de viajeros.
Asimismo, se aplicará un descuento del 75% en la tasa de pasajeros para viajeros adicionales en una ruta, siempre y cuando el tráfico crezca en el conjunto de la red y en la ruta. De ese 75%, se repartirá en un 50% la bonificación en el propio ejercicio y el 25% restante en 2015 si la compañía mantiene el número de pasajeros.
La media del coste de las tasas aeroportuarias para una compañía de red es del 8%, de las cuales las de pasajero representan entre el 60% y 70% de los costes totales, frente al 16-17% del total del coste medio de las tarifas para las low cost, donde hasta el 70% procede de las tasas por viajero.
50 millones de coste solo en 2014
Estas bonificaciones al crecimiento del tráfico aéreo y a la apertura de nuevas rutas le supondrán un impacto negativo de 50 millones de euros al gestor aeroportuario en su beneficio bruto de explotación (Ebitda) solo en 2014 y algo menos de 25 millones de euros en 2015.
Los nuevos incentivos se sumarán a los que ya existen: el descuento del 50% sobre la tasas de pasajero en días valle en los aeropuertos canarios y una bonificación del 20% en aeropuertos estacionales, como el caso de las islas Baleares.
250 millones de déficit tarifario
El presidente de Aena, José Manuel Vargas, recordó que en 2011 se encontraron con un déficit tarifario de 850 millones de euros en el ente, que gracias la contención de costes y a otras medidas aplicadas se ha reducido hasta los 250 millones de euros.
Vargas confió en que con la continuidad de la política de contención de costes, el acuerdo de estabilidad tarifaria alcanzado con el sector, los nuevos incentivos y las previsiones de crecimiento del tráfico aéreo –en torno al 2%–, llegue un momento que no se apliquen nuevas subidas.
“El objetivo es que cuando llegue el final del acuerdo con las compañías aéreas en 2018, no solo se mantenga las tasas sino que incluso bajarán”, defendió, siempre y cuando no haya déficit.
Según Vargas, las nuevas bonificaciones que se ponen en marcha son “el mayor incentivo” para incrementar el tráfico aéreo en Europa. “La decisión de abrir una ruta depende de la demanda no de una mayor o menor tasa, pero habrá un nivel de descuentos de los más altos de Europa”, destacó.
Las rutas domésticas, las más beneficiadas
El director general de Aena, Javier Marín, incidió en que con este nuevo plan de incentivos las rutas entre los aeropuertos españoles, las que más han visto reducir sus viajeros con la crisis, salen “todavía más beneficiadas”, ya que se incentivan en origen y en destino.
Marín se mostró convencido de que esta bonificación al 100% servirá para acelerar el crecimiento del tráfico aéreo en la salida de la crisis, especiamente en las rutas domésticas. Al respecto, el presidente de AENA indicó que el aeropuerto de Madrid-Barajas, al tratarse de un hub de recepción y salida de vuelos será el más beneficiado.