Un Boeing 737 de la aerolínea turca Pegasus se ha salido de la pista al aterrizar en el aeropuerto Sabiha Gökçen de Estambul, lo que ha provocado la rotura del aparato en tres partes y ha dejado al menos tres muertos y 139 heridos, según han informado las autoridades locales.
El avión, en el que viajaban 183 personas, volaba de Izmir a Estambul, ciudad que se ha visto golpeada por fuertes vientos y lluvias. Algunos de los pasajeros pudieron salir de la aeronave por las alas del avión, según las imágenes grabadas por medios locales.
Según el ministro de Transporte, Mehmet Cahit Turhan, los primeros indicios apuntan que “el avión se salió de la pista y entró en la tierra tras un fuerte aterrizaje”. La Fiscalía ha abierto una investigación, informa la agencia de noticias oficial Anatolia.
Los heridos, repartidos en 18 hospitales
El gobernador de Estambul, Ali Yerlikaya, ha confirmado que al menos 139 personas han sido atendidas tras este accidente y están repartidas por 18 hospitales. La Embajada de España ha asegurado en Twitter que las autoridades turcas ya han descartado que hubiese pasajeros españoles a bordo.
La aerolínea Pegasus ha publicado un comunicado en Twitter en el que muestra su “profunda tristeza” por las tres víctimas mortales del accidente y asegura que su prioridad es “apoyar a los familiares y amigos que han perdido a sus seres queridos” y a los heridos que se están recuperando.