Los turistas que habitualmente visitan España pueden encontrar en el efecto del tipo de cambio un aliado para ahorrarse un dinero en sus vacaciones.
El desplome sufrido por el euro en los últimos meses podría tener un efecto de atracción para los turistas que habitualmente visitan nuestro país por vacaciones, asegura Ebury en un informe que refleja la fluctuación que ha registrado la cotización del euro en los últimos doce meses en relación con las monedas de los principales países de destino turístico para los españolas y de los mercados emisores esenciales de turistas hacia España. Prácticamente, la moneda común se ha depreciado en este periodo frente a todas las divisas de los países emisores, con excepción de la lira turca.
“El sector turístico espera que este año se recuperen los niveles previos al inicio de la pandemia, en un verano que podría estar marcado por los efectos de la inflación y de la guerra en Ucrania. Sin embargo, los turistas que habitualmente visitan España pueden encontrar en el efecto del tipo de cambio un aliado para ahorrarse un dinero en sus vacaciones, debido a la progresiva pérdida de valor de la moneda común con respecto a sus divisas locales”, subraya Duarte Líbano Monteiro, director regional de Ebury para el Sur de Europa.
Paridad euro-dólar
En el caso de Estados Unidos, que figura como uno de los principales países de procedencia de los turistas, sus ciudadanos encontrarán este año un aliciente adicional para visitar nuestro país, en tanto que el euro se ha dejado en los último 365 días un 13,73% con respecto al dólar estadounidense, hasta alcanzar la paridad e, incluso, haber caído en algún momento por debajo. Asimismo, nuestros primeros “clientes”, los británicos, hallarán un euro que cotiza un 1,5% por debajo que hace un año respecto a la libra.
Países como Suiza, México y Brasil, que también han sido tradicionalmente emisores de viajeros hacia España, han visto como sus monedas se han revalorizado con respecto al euro en el último año. Así, el euro ha perdido un 9,46% frente al Franco suizo. Peor ha sido la evolución frente al Peso mexicano y el Real brasileño, en cuyo cruce la moneda común se ha dejado un 12,03% y un 12,51%, respectivamente.
Los viajeros canadienses y chinos, habituales también en nuestro país, serán además de los que puedan viajar este año por menos dinero. Sus monedas locales se han apreciado frente al euro. En el caso de Canadá, el euro ha perdido algo más de un 12% del valor que tenía hace un año. Por su parte, con respecto al Yuan Chino, la moneda común se ha dejado un 10,81%
Tan sólo los turistas turcos verán encarecida la factura de sus viajes a España, puesto que el euro se ha apreciado casi un 80% frente a la Lira.
Destinos más caros para los viajeros españoles
Otra de las consecuencias de la caída del euro será que más de la mitad los destinos más populares entre los turistas españoles durante el verano serán este año más caros. Es el caso, como ya se ha citado, de Estados Unidos o México, pero también sucede con Marruecos, Tailandia y Vietnam.
Si bien las diferencias del euro frente al Dirham marroquí y el Baht tailandés son algo más estrechas (apenas un 1% con respecto a la primera y un 3,94% con respecto a la segunda), la horquilla se ensancha en el caso del Dong vietnamita. Efectivamente, los turistas que decidan viajar a Vietnam este verano sí notarán la pérdida de valor del euro de un 12,8% en el último año frente a la moneda local.
En el lado opuesto de la balanza se encuentran los países cuyas monedas se han devaluado frente al euro, haciendo que la moneda común gane valor y, por tanto, sean destinos a tener en cuenta por los españoles. Se trata de países como Argentina, donde el euro ha ganado casi un 16% en los últimos 365 días, si bien la hiperinflación que soporta el país puede ser un elemento que pese adversamente en la elección.
Sin embargo, considerando solo el factor divisa, destinos como Egipto, Polonia y Croacia seguirían manteniendo su atractivo. El euro gana un 4,19% frente a la Lira egipcia; un 3,97% en el cruce con el Esloti polaco y apenas un 0,1% frente a la Kuna croata.
