España acabará el año recuperando entorno al 85% de los turistas internacionales y más del 95% del gasto por turismo, según adelantó la ministra de Industria, Comercio y Turismo Reyes Maroto en la ‘II Convención de Turespaña’ en la que abogó por reforzar los mecanismos de colaboración y coordinación público-privada en el sector turístico español para favorecer el desarrollo de estrategias conjuntas que consigan mantener a España como líder turístico mundial.
La ministra considera que los buenos datos turísticos registrados este verano y los esperados para el próximo invierno hacen anticipar que España se acerque a la recuperación casi total de los registros anteriores, después de dos años lastrados por la pandemia.
Durante la ‘II Convención de Turespaña’ que reunirá durante tres días en Barcelona a los principales actores públicos y privados del sector turístico de nuestro país, Maroto recordó que España es uno de los destinos más deseados del mundo y que prueba de ello es la recuperación de los indicadores turísticos a niveles previos a la pandemia, “con una mejora incluso en otros indicadores fundamentales para el desarrollo del sector como el gasto turístico o la estancia media”.
Maroto adelantó además que los datos de turistas internacionales y de gasto turístico correspondientes al mes de agosto que se darán a conocer mañana “mantienen la tendencia de recuperación observada desde principios de año”.
Apuesta por la gobernanza en el turismo
Durante el evento turístico que se celebra esta semana en Barcelona bajo el lema ‘La gobernanza del turismo’, la ministra instó a reforzar el modelo turístico para que las políticas públicas turísticas tengan en cuenta las necesidades del sector abriéndose a “nuevos prismas, a nuevas vías de acción y generando una hoja de ruta compartida”, con el sector privado.
“Confío en que este encuentro nos sirva para reforzar la colaboración público-privada, la visión conjunta, las sinergias generadas y el compromiso de actores públicos y privados para trabajar en esa red que determinará el futuro del turismo en los próximos años y nos permitirá afrontar los retos y las oportunidades con éxitos”, explicó la ministra.
Una recuperación que no solo se produce en los principales mercados emisores sino también en otros mercados como Estados Unidos o Iberoamérica que están experimentando “crecimientos notables”, gracias en parte a la apertura de nuevas rutas.
Estos datos hacen a la ministra prever que España acabe el año recuperando entorno al 85% de los turistas internacionales y más del 95% del gasto por turismo. “Lo cual nos da un escenario para este año de confianza”, indicó la ministra, quien no obstante reconoció desafíos a afrontar como la prolongación de la guerra de Ucrania o los altos niveles de inflación.
La ministra recordó el “ambicioso plan” de modernización y competitividad turística desplegado por el Gobierno financiado por los fondos Next Generation “que tiene como objetivo mejorar la competitividad de la industria turística española a través de un nuevo modelo basado en la calidad, en la sostenibilidad y en la digitalización”.
Maroto adelantó además que en esta Convención se va a presentar una nueva encuesta sobre la satisfacción del visitante que permitirá a destinos y empresas conocer la valoración de los turistas internacionales que nos visitan.
La ministra adelantó que los primeros datos registrados este verano ponen de manifiesto la elevada satisfacción de los visitantes internacionales, ya que el 96% están "satisfechos o muy satisfechos". La oferta de ocio y las infraestructuras son los aspectos que mayor nivel de satisfacción tienen destacando también el trato recibido en los establecimientos alojativos.
El turismo, un sector transversal
En la apertura de la convención de este lunes también participó el director general de Turespaña, Miguel Sanz, quien reiteró la importancia de la gobernanza en el sector turístico español, que debe ser en su opinión "no una meta final, sino un trabajo constante" para que España siga siendo líder en competitividad turística a nivel mundial.
Miguel Sanz recordó que el turismo es la primera industria del país generando un gasto de más de 90.000 millones de euros en 2019.
“El turismo es un sector transversal a toda la economía, por lo tanto es un sector muy complejo. Tenemos que hacer una transformación del modelo turístico que incorpore la sostenibilidad medioambiental, social y económica en el corazón de la industria y para eso necesitamos el trabajo de todos los gestores públicos y de sector privado”, explicó Sanz.
El director general de Turespaña recordó que el turismo es la primera industria del país generando un gasto de más de 90.000 millones de euros en 2019 ocupando a más del 13% de la población activa de este país. Por ello abogó por establecer un plan de acción conjunto de España en el exterior “para que España en el exterior suene más como un coro que como pequeñas melodías inconexas”.
El turismo, un reto compartido
Desde la Generalitat de Cataluña, la directora general de Turismo del departamento de Empresa y Trabajo, Marta Domenech, animó a las administraciones públicas a "acompañar y orientar al sector pensando siempre en el interés colectivo".
Así, abogó por reformular el modelo actual desde el diálogo y la colaboración “asumiendo que es un reto compartido por todos” y que “sólo se podrá lograr desde la gobernanza”. “Para poder construir un modelo turístico sostenible medioambiental, social y económicamente”, indicó.
“El turismo catalán aspira a ser la solución y no el problema”, aseguró la directora general de turismo de la Generalitat, quien apostó por un modelo turístico que incorpore además la dimensión digital en todas sus modelos de negocio impulsando todo tipo de sinergias.
Por ello instó a avanzar en la construcción de modelos turísticos “mucho más sostenibles y adaptadas a las realidades territoriales”.
Una opinión compartida por el primer teniente de alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, quien también comparte la necesidad de modernizar el modelo turístico español para hacerlo más sostenible y competitivo, todo ello basado en un modelo de gestión público-privada "que ha demostrado ser un éxito en Barcelona" desde la etapa olímpica.
“Barcelona es mucho más que una ciudad turística. Barcelona tiene una industria turística muy potente que quiere preservar, mejorar y poner al servicio de la ciudad, al servicio de la creación de empleo y al servicio de su proyección internacional”, justificó.