Las tres mayores aerolíneas de Estados Unidos esperan duplicar el número de vuelos a China en los próximos meses, tras el levantamiento de las restricciones de vuelos al país asiático tras la pandemia y la mejora de la situación sanitaria mundial.
American Airlines tiene previsto añadir tres vuelos semanales entre Dallas y Shanghai a principios del próximo año. Esta decisión se produce después de que sus rivales Delta Airlines y United Airlines también hicieran públicos sus planes de ampliar y ampliar las rutas entre Estados Unidos y China en los próximos meses.
Las compañías aéreas se apresuran de este modo a volver al mercado transpacífico después de que el Departamento de Transporte de Estados Unidos asegurara hace unos días que el límite de vuelos que existía entre ambos países iría aumentado en los dos próximos meses.
En total, las tres compañías, que actualmente sólo operan cuatro vuelos semanales cada una a China, han propuesto añadir 19 rutas más hasta finales de enero, a la espera de la aprobación de las autoridades reguladoras.
Estos planes provisionales de las aerolíneas superan los límites de vuelos anunciados por las autoridades estadounidenses, lo que hace prever que algunos de los nuevos vuelos anunciados podrían ser rechazados por los supervisores.
Aumento de viajes ante la débil de demanda interna
Las grandes compañías aéreas están aprovechando el aumento de los viajes internacionales para contrarrestar la débil demanda interna, a medida que más países relajan las restricciones impuestas en los últimos años.
La recuperación de los viajes a Asia ha sido más lenta que la del mercado europeo, y los vuelos a China han estado especialmente restringidos por el departamento de transporte estadounidense.
American Airlines, que ofrecerá vuelos diarios entre el Aeropuerto Internacional de Dallas-Fort Worth y el Aeropuerto Internacional de Shanghai Pudong a partir de enero, tiene previsto comenzar ya a vender plazas en los nuevos vuelos.
También Delta Airlines anunció que ofrecerá vuelos diarios de Seattle a Shanghai a partir del 29 de octubre y que volará tres veces por semana de Detroit a Shanghai. También tiene previsto añadir vuelos Los Ángeles-Shanghai cuatro veces por semana en marzo.
Por su parte, United reveló la semana pasada sus planes de reanudar los vuelos diarios entre San Francisco y Pekín en noviembre y aumentar a vuelos diarios entre San Francisco y Shanghai a partir del 1 de octubre.
Las tres aerolíneas estadounidenses se reparten actualmente un total de 12 vuelos semanales entre ambos países. Esta cifra aumentará a 18 frecuencias semanales a partir del 1 de septiembre y a 24 frecuencias el 29 de octubre, según informó el departamento de transporte estadounidense. Las compañías chinas también se repartirán el mismo número creciente de vuelos semanales a Estados Unidos.
Los vuelos entre China y Estados Unidos estaban regulados antes de la pandemia por un tratado de servicios aéreos firmado por ambas naciones. Las autoridades estadounidenses se hicieron cargo de la regulación de los vuelos después de que China impusiera unilateralmente en el año 2020 límites a los servicios de las aerolíneas estadounidenses relacionados con la pandemia.