American Airlines registró unas pérdidas netas de 237,1 millones de euros (256 millones de dólares) en los primeros nueve meses del año, lo que supone un descenso del 68,1% con respecto al mismo periodo del año anterior.
Entre enero y septiembre, el beneficio operativo, según ha informado este miércoles la compañía, cayó un 37,8%, hasta los 1.370 millones de euros (1.480 millones de dólares).
Los ingresos del periodo alcanzaron los 37.561 millones de euros (40.551 millones de dólares), un 2,1% más, mientras que los gastos se incrementaron un 4,6%, hasta los 36.190 millones de euros (39.071 millones de dólares).
Asimismo, la aerolínea transportó a 170,5 millones de pasajeros hasta septiembre, un 8,6% más, y alcanzó un factor de ocupación del 85%, 1,5 puntos porcentuales más.
El consejero delegado de American Airlines, Robert Isom, ha señalado que el equipo de la compañía está centrándose en desarrollar una operación “fiable” y en gestionar los costes de toda la aerolínea.
“Hemos tomado medidas agresivas para reajustar la estrategia de ventas y distribución”, ha indicado en un comunicado, agregando que el objetivo es recuperar a los viajeros de negocios.