El secretario de Estado de Turismo, Fernando Valdés, apuesta por mejorar la calidad de la oferta turística española ofreciendo al viajero más opciones en destino, según afirma a la revista Agenttravel.
¿Cómo encara el nuevo año 2022?
Si 2021 ha sido el año del inicio de la recuperación, con un turismo doméstico que ha mostrado un gran dinamismo alcanzando ya en el tercer trimestre de este año los niveles de 2019, 2022 será el año de la consolidación de la recuperación. Soy optimista porque la experiencia vivida nos dice que cuando se levantan las restricciones a los viajes, la demanda responde de manera muy positiva. Hay muchas ganas de viajar a España, y quien nos visita ya gasta más dinero de media en su viaje y permanece más tiempo en nuestro país.
¿Cómo valora el año 2021 en cuanto a la entrada de turistas?
El turismo doméstico se ha comportado mejor de lo que esperábamos, y la evolución del turismo internacional se ha desarrollado tal y como preveíamos. A falta de conocer las cifras de cierre de año, tanto las llegadas como el gasto de los turistas internacionales se acercarán a valores alrededor del 50% de un año récord como fue 2019. En 2022 esperamos recuperar las cifras prepandémicas en nuestros mercados del entorno europeo. El regreso a la normalidad con los mercados de largo radio puede que tenga que esperar un poco más.
“Todos somos más conscientes de lo que aporta la experiencia de viajar a nuestro bienestar”
Se trata realmente de un presupuesto histórico. Nunca antes España contó con semejante volumen de recursos para la política turística. En 2022, nuestro presupuesto crece un 35,67% respecto de las cuentas de 2021, que ya fueron históricas. Actuamos en torno a cinco grandes ejes: transformación de la oferta turística hacia la sostenibilidad; apuesta por la digitalización e inteligencia turística; estrategias de resiliencia turística en territorios extra peninsulares; actuaciones para la mejora de la competitividad; y, finalmente, promoción turística. En el ámbito de la sostenibilidad, destaca la convocatoria extraordinaria de Planes de Sostenibilidad Turística en Destino, para los que contaremos con 720 millones. Para el eje de digitalización contaremos con 115 millones que destinaremos a consolidar el Sistema de Inteligencia Turística, a la creación de una plataforma inteligente de destino, y al programa de transformación digital e innovación de las empresas del sector.
Canarias y Baleares contarán con 50 millones cada una para sus estrategias de resiliencia, mientras que para los planes de Ceuta y Melilla habrá cinco millones para cada uno de ellos. En el apartado de competitividad, tenemos que destacar el programa de desarrollo de Experiencias Turismo España, con 49 millones; el plan de mejora de sistemas de eficiencia energética y economía circular en empresas turísticas de alojamiento, con 170 millones, o el de rehabilitación y conservación de patrimonio de uso turístico, con 300 millones. El presupuesto de Turespaña para la promoción de nuestro destino crece también hasta alcanzar los 89,6 millones de euros.
¿Qué parte de este presupuesto sale de los fondos europeos?
1.557,7 millones de euros proceden de los fondos europeos, que nos van a permitir acometer por fin las transformaciones pendientes de nuestro modelo de turismo, como la necesidad de desestacionalizar y diversificar la llegada de turistas a nuestro país, entre otras.
¿Cómo cree que cambiará el turismo tras la pandemia?
Creo que ahora todos somos más conscientes de lo que aporta la experiencia de viajar a nuestro bienestar y felicidad. Y esta toma de conciencia nos va a llevar también a ser cada vez más exigentes en nuestros viajes. Queremos experiencias inolvidables, auténticas, que hagan única nuestra visita, pero queremos también– y esto sobre todo es cada vez más evidente en las generaciones más jóvenes–, que nuestra estancia no impacte de manera negativa en el territorio.
“La sociedad ha sido más consciente de la relevancia que el turismo tiene en nuestra economía”
Hay un consenso generalizado en que la sostenibilidad y la digitalización son ya las grandes tendencias del momento. Y creo que esto llega en el mejor momento para España, que tiene un abanico de oferta muy amplio por colocar aún en los mercados internacionales, donde nuestra posición de liderazgo en el turismo de sol y playa está muy consolidada, pero no tanto en otro tipo de turismo donde tenemos también todo para ser líderes mundiales, como puede ser el turismo cultural o de naturaleza.
¿Qué tipo de turismo quiere?
El único turista malo para España es el que no viene. España es un país para todo tipo de turistas y de perfiles. Debemos aspirar a ofrecer un turismo de mayor calidad, porque no podemos competir bajando los costes, pero eso no equivale a centrarse exclusivamente en el segmento luxury. Mejorar la calidad de nuestra oferta es ofrecer al visitante más alternativas de destinos, un catálogo más diverso y sugerente de experiencias que convierta a España en un destino atractivo para visitar los doce meses del año y que incremente el valor añadido de la estancia.
¿Cómo va a trabajar para diversificar la oferta de producto de España?
Tanto con el programa de Planes de Sostenibilidad como con las inversiones en patrimonio histórico estamos haciendo una apuesta muy decidida por desarrollar el atractivo de nuestra España interior y de nuestras urbes de tamaño medio, como son nuestras Ciudades Patrimonio de la Humanidad, por ejemplo. El destino es nuestra mejor carta de presentación al mundo. La digitalización de nuestros destinos y empresas va a ser una herramienta clave para captar nuevos segmentos de turistas que aún no conocen esta cara de nuestro país y a los que tenemos que salir a buscar.
¿Cómo va a luchar contra la estacionalización del sector?
Ahora mismo, el grueso de los visitantes que recibimos son turistas del entorno europeo que nos eligen para pasar sus vacaciones de verano. Nuestro modelo de sol y playa está muy bien posicionado y tenemos que trabajar para que así siga siendo. Pero si queremos que nos visiten a lo largo de todo el año, debemos reforzar el atractivo de nuestra oferta de turismo cultural y patrimonial –por la que nos elige el turista de largo radio– y ampliar nuestro catálogo de experiencias, desarrollando todo nuestro potencial como la referencia gastronómica y vitivinícola que somos, pero también como destino de naturaleza ¡Somos el país del mundo con más Reservas de la Biosfera! Podemos ser cada vez más eficaces con nuestra acción de marketing y segmentar las ofertas para atraer turistas durante todo el año.
¿Cuáles son los objetivos de la Secretaría en cuanto a sostenibilidad y digitalización del sector?
Cuando hablamos de transitar hacia un modelo más sostenible, no solo nos referimos a desarrollar un turismo que no degrade el medio ambiente. Aspiramos también a una sostenibilidad socioeconómica y territorial. ¿Y esto qué quiere decir? Básicamente, que el turismo ha de ser una actividad que contribuya a la generación de empleo y riqueza en el territorio donde se desarrolla y entre la población residente, porque la actividad turística tiene la capacidad como ninguna otra de tirar de otros sectores de nuestra economía, como el comercio o la producción agroalimentaria. Y esto se tiene que producir a lo largo y ancho de toda nuestra geografía, no solo en unos determinados puntos que reciban unos flujos excesivos de demanda.
“Esperamos un buen verano de 2022 en nuestros principales mercados emisores”
¿Qué medidas están tomando para recuperar al turismo internacional?
Lo que hemos vivido en lo que llevamos de pandemia nos ha mostrado que, en cuanto se levantan las restricciones, la demanda responde de manera muy positiva. El exitoso proceso de vacunación en nuestro país nos ha permitido tener un buen verano, que hemos conseguido alargar hasta octubre, un mes en el que por primera vez en nuestra historia nos visitaron casi tantos turistas internacionales como en agosto.
A corto plazo nuestra prioridad ha sido y sigue siendo recuperar los mercados de nuestro entorno europeo, Reino Unido incluido, porque buena parte de los mercados lejanos aún siguen cerrados. Esperamos un buen verano de 2022 en nuestros principales mercados emisores.
Después de esta crisis, ¿ha sacado alguna enseñanza el sector turístico?
La sociedad en general ha sido más consciente de la relevancia que el turismo tiene en nuestra economía. Y esto creo que es positivo. El turismo ha sido, sin duda, el sector más golpeado por la pandemia, pero al mismo tiempo ha demostrado una capacidad de resistencia y adaptación ejemplares, desarrollando en tiempo récord, por citar un ejemplo, unos protocolos sanitarios que han sido la referencia de posteriores estándares europeos e internacionales. Tenemos un sector del que podemos estar orgullosos.
Al mismo tiempo, este ha comprobado en primera persona que puede contar con el Gobierno, que desde el minuto uno de la pandemia desplegó un escudo social de protección, con medidas como los ERTE o los ICO que ascienden a 52.000 millones de euros. La obsesión del sector este 2021 ha sido también la del Gobierno: “Vacunar, vacunar y vacunar”. Una segunda lección es la cooperación. Cuando hemos sabido trabajar juntos, no solo entre administraciones, sino también entre sector público y privado, el resultado ha sido mejor.
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