La aerolínea Air Europa realizó el pasado viernes su vuelo más ecológico de su historia, con la mira puesta en la adopción continua de soluciones medioambientalmente sostenibles que permitan acelerar la innovación responsable y conduzcan a reducir el impacto de la aviación en el entorno.
El vuelo se operó el pasado 6 de mayo entre Madrid y Gran Canaria con un Boeing 787-9 Dreamliner. La aerolínea adquirió biocombustible producido a partir de aceite vegetal en la refinería de Petronor en Bilbao. El avión empleado, con capacidad para 339 pasajeros, es uno de los modelos más eficientes del mercado, capaz de reducir en un 20% tanto las emisiones como el consumo de combustible gracias a su aerodinámica y tecnología más innovadora. Además, el Boeing 787-9 reduce también su impacto acústico en un 60%.
La operativa de este vuelo, para el que se trabajó en su ruta más eficiente y que contó con tripulación paritaria, incluyó también un procedimiento en tierra más sostenible. Groundforce, empresa de servicios aeroportuarios de handling, utilizó sus vehículos dotados de la última tecnología para todas las operaciones de tierra que rodean la salida y la llegada de un vuelo. Por su parte, Enaire colaboró en la realización de los procedimientos del ascenso y descenso continuos, así como en la trayectoria más óptima para un eficiente consumo de combustible y, por lo tanto, una reducción notable de las emisiones de CO2.
A bordo, Air Europa activó muchas de las prácticas sostenibles ya habituales en su operativa. Una de ellas fue el uso de materiales biodegradables, como fase previa a la progresiva y total implantación del “plástico cero a bordo”, así como la correcta segregación de residuos, medida que la aerolínea aplica desde 2006 en sus oficinas y todos sus vuelos. Durante la operativa, se ofreció un menú sostenible y saludable, elaborado con productos de temporada y de kilómetro cero, con los que se refuerza el cuidado del medio ambiente y se potencia la economía circular.
El vuelo, en el que se realizó una correcta segregación de residuos, contó con tripulación paritaria.
La aerolínea, que invitó a los pasajeros a efectuar el check-in online, hizo partícipe a los pasajeros repartiendo a bordo una encuesta de satisfacción y utilizando para ello papel de usar y plantar, con el que posteriormente se creará un pequeño jardín en la sede de la compañía.
Esta iniciativa se enmarca en el desafío “The Sustainable Flight Challenge” (El Reto del Vuelo Sostenible) que la alianza SkyTeam ha lanzado a sus aerolíneas asociadas. La finalidad es que el sector acelere la innovación y el cambio reduciendo al máximo el impacto en el medioambiente. Dicho reto consiste en una competición amistosa entre las compañías de la alianza, que pueden participar hasta en 14 categorías diferentes a través de la aplicación de soluciones de responsabilidad avanzadas con el objetivo de que las más exitosas se lleven a la práctica de forma constante, siempre que sea posible, para avanzar sin comprometer el medio ambiente.