Paradores ha adaptado un sistema de trabajo y retribución a la situación derivada del estado de alarma por el que los trabajadores que hayan visto paralizada su actividad cobrarán su salario menos la prima de producción.
Así, estos trabajadores recibirán la totalidad de su salario base, con la parte prorrateada de las pagas extraordinarias, los complementos personales y de puesto y los pluses de montaña, Hierro y residencia. Sin embargo, no percibirán la prima de productividad, determinada por la facturación de la compañía como establece el convenio colectivo, según ha explicado Paradores a sus trabajadores en un comunicado.
La cadena aclara que la media que supone la prima de producción es del 23,47% del salario, lo que supone una media mensual para un trabajador a jornada completa de 391 euros.
De su parte, los trabajadores que sigan trabajando de manera presencial o telemática, así como los que hayan decidido de manera voluntaria disfrutar de días de vacaciones o abonables, percibirán el total de su salario más la prima de producción, calculada conforme al valor medio del periodo entre septiembre de 2019 y febrero de 2020.
La compañía indica que estas medidas están destinadas a mantener los puestos de trabajo y evitar “perjudicar” a la plantilla con un ERTE.
Críticas de CSIF
Este mismo lunes, la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha criticado que la cadena hotelera pública tuviese la intención de recortar un 50% el salario de la plantilla y practicar un “ERTE camuflado” desde el pasado 16 de marzo.
Según indicaba CSIF, con esta medida “un amplio colectivo de trabajadores” no llegaría a cobrar “ni el salario mínimo”, por lo que exigía al Gobierno una solución para los trabajadores de la cadena hotelera pública que figuran como empleados públicos en el convenio.
El sindicato plantea que se respeten las condiciones laborales y que las jornadas que no se están pudiendo realizar se compensen por parte de los trabajadores en los próximos años ampliando el horario.
CSIF considera que el “colchón” de beneficios de los últimos años “debe utilizarse en una época como esta” y señala que la compañía pretende “realizar un ERTE camuflado a sus trabajadores sin utilizar esta palabra”, ya que el Gobierno lo ha prohibido para las empresas públicas.